Con una fortuna de 12.500 millones de dólares, Melinda French, anteriormente Gates, ha anunciado la creación de su propia organización benéfica llamada Pivotal Ventures, para la cual ha destinado 1.000 millones de dólares. La filántropa estadounidense, que se divorció de Bill Gates en 2021, reveló su nuevo proyecto solo dos semanas después de renunciar a la Fundación Bill y Melinda Gates, que cofundó junto a su ex esposo, cuya fortuna se estima en 130.000 millones de dólares.
En un artículo publicado en The New York Times, Melinda expresó que «durante mucho tiempo, la falta de recursos ha obligado a las organizaciones que luchan por los derechos de las mujeres a adoptar una postura defensiva mientras los adversarios del progreso avanzan a la ofensiva». Detalló su plan de distribución de fondos en una entrevista con el semanario francés Madame Figaro.
Una nueva asignación
Melinda explicó que «se asignarán 250 millones de dólares en subvenciones a asociaciones que defienden los derechos de las mujeres, incluyendo la libertad reproductiva en Estados Unidos. Otros 250 millones de dólares se destinarán a colaboraciones con un grupo de 12 líderes (…) Además, se invertirán 250 millones de dólares en la salud física y mental de las mujeres a través de una iniciativa que se lanzará el próximo otoño». Entre estos líderes destaca Jacinda Ardern, quien fue primera ministra de Nueva Zelanda hasta enero de 2023.
Melinda resta importancia al hecho de que durante años su matrimonio fue uno de los más ricos e influyentes del mundo. Con una notable sensibilidad, la ex esposa del fundador de Microsoft siempre ha estado comprometida con ayudar a los más vulnerables. Esta empatía se ha visto sin duda reforzada por su experiencia como madre de tres hijos.
El legado en sus hijos
La mayor de los hijos Gates, Jennifer, de 28 años, tiene una licenciatura en Biología Humana por la Universidad de Stanford y recientemente se graduó en la Escuela de Medicina Icahn del Monte Sinaí en Nueva York. En 2021, se casó con Nayel Nassar, jinete olímpico de origen egipcio, con quien tiene una hija llamada Leila, que ya tiene más de un año.
El segundo hijo, Rory, de 26 años, es el más reservado de la familia, prefiriendo mantenerse alejado de las redes sociales. Se graduó en solo cuatro años de la Universidad de Chicago con un doble grado en Ingeniería Informática y Económicas, y también posee un máster. Su madre lo describe como «compasivo y curioso».
La menor de los Gates, Phoebe, sigue los pasos académicos de su hermana mayor, estudiando Biología Humana en Stanford. Además, es una apasionada de las artes, especialmente la danza, habiendo estudiado en The School of American Ballet y en la Juilliard School. Phoebe es la más inclinada a asistir a eventos públicos como la Semana de la Moda de Nueva York, y disfruta de las redes sociales y la fotografía. Al igual que su madre, es muy combativa.
En junio de 2022, Phoebe publicó en Instagram una foto en la que defendía la salud femenina. «Mi cuerpo, mi decisión. No me avergüenzo de mi cuerpo y te digo que mantengas tus prohibiciones fuera de él. Toda persona merece acceso a la atención de la salud sexual», expresó con determinación.
Suscríbete a la revista y regístrate a nuestros newsletters para recibir el mejor contenido en tu buzón de entrada.
