El impacto económico del ecosistema móvil en Latinoamérica - Revista Mercado

El impacto económico del ecosistema móvil en Latinoamérica

Por | marzo 6, 2025

El ecosistema móvil global atraviesa una fase de transformación acelerada, impulsada por la expansión de tecnologías como 5G, IoT, Inteligencia Artificial (IA) y el crecimiento de servicios digitales que amplifican su impacto económico.

Así lo revela el informe anual sobre la economía móvil 2024, publicado por la Asociación GSM o Sistema Global para Comunicaciones Móviles (GSMA), que ofrece un panorama exhaustivo sobre la contribución del sector móvil a la economía mundial y las perspectivas hacia 2030.

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El impacto global de la economía móvil

A nivel mundial, las tecnologías y servicios móviles generaron el 5,8 % del PIB iniciando el 2024, equivalente a 6,5 mil millones de dólares. Sin embargo, este impacto económico está lejos de alcanzar su techo. Según el informe, se espera que para 2030 esta cifra aumente a 11 mil millones de dólares, representando el 8,4% del PIB global.

Este crecimiento estará impulsado por la mayor adopción de tecnologías como el 5G, el IoT y la IA, que están mejorando la productividad y la eficiencia en diversos sectores.

Entre los principales beneficiarios de esta revolución digital se encuentran la industria manufacturera, que podría ver un incremento del 25 % en su productividad, seguida por los sectores de alojamiento y servicios de alimentación (17 %) y la administración pública (14 %). Además, se prevé que el número de usuarios de internet móvil aumente de 4,700 millones en 2024 a 5,500 millones en 2030, lo que representa el 64 % de la población mundial.

América Latina: Un ecosistema móvil en expansión

En América Latina, el impacto de las tecnologías móviles es igualmente significativo. En 2023, estas tecnologías contribuyeron con el 8 % del PIB regional, generando un valor económico agregado de 520,000 millones de dólares.

Este crecimiento ha sido impulsado por la rápida adopción de internet móvil, que alcanzó a 418 millones de personas, el 65 % de la población regional. Este avance representa un incremento de 75 millones de usuarios en los últimos cinco años.

Sin embargo, el futuro de la conectividad en la región enfrenta desafíos complejos. A medida que los países se acercan a los límites de conectividad bajo las condiciones actuales del mercado, será necesario implementar reformas regulatorias y políticas públicas que permitan maximizar el potencial de las tecnologías móviles.

La GSMA destaca que, para 2030, se espera que el 55% de las conexiones móviles en América Latina sean 5G, superando a la tecnología 4G como la dominante.

El impulso del 5G en la región

El despliegue del 5G en América Latina ya está en marcha. Para abril de 2024, 29 operadores en 10 países habían lanzado servicios comerciales de 5G, cubriendo el 5% de las conexiones móviles.

Este porcentaje se espera que aumente al 55 % para 2030, con países como Brasil, México y Chile liderando la adopción. Movistar Chile, por ejemplo, ya ha superado el millón y medio de clientes 5G, lo que representa casi el 20 % de sus conexiones totales.

Los primeros casos de uso del 5G en la región se centran en mejorar la banda ancha móvil (eMBB) y el acceso inalámbrico fijo (FWA), que responden a la creciente demanda de conectividad. Además, las redes 5G privadas están ganando terreno, ofreciendo soluciones empresariales que abordan problemas de latencia, confiabilidad y densidad de conexiones.

El crecimiento del tráfico de datos y el IoT

El tráfico de datos móviles en América Latina está experimentando un crecimiento exponencial. Se prevé que aumente a una tasa promedio del 25,5 % entre 2023 y 2030, alcanzando más de 24 exabytes (EB) mensuales para finales de la década.

Este incremento está siendo impulsado por la adopción de nuevos servicios, como la realidad extendida (RE), que podría ver un impulso significativo con la entrada de dispositivos como el Apple Vision Pro.

En cuanto al IoT, se espera que el mercado celular en la región crezca a una tasa promedio del 8 % durante el mismo período. Brasil y México serán responsables del 80 % de este crecimiento, aunque países como Argentina, Colombia y Chile también verán un aumento en la adopción de tecnologías IoT. La disponibilidad de redes de área amplia de baja potencia (LPWA) está facilitando esta expansión, con lanzamientos recientes como LTE-M en Colombia y NB-IoT en Chile.

Desafíos y oportunidades para los operadores

A medida que la adopción de internet móvil se ralentiza, los operadores enfrentan el desafío de encontrar nuevas fuentes de ingresos más allá de la conectividad tradicional. Según GSMA Intelligence, los servicios no tradicionales, como soluciones empresariales y plataformas IoT, están ganando relevancia como motores de crecimiento.

En los últimos cinco años, los operadores latinoamericanos han invertido 57,000 millones de dólares en capital, y se espera que esta cifra alcance su punto máximo en 2027 con 15,000 millones de dólares anuales.

El impacto económico y laboral del ecosistema móvil

El ecosistema móvil en América Latina no solo contribuye al PIB, sino que también genera empleo y recaudación tributaria. En 2023, el sector móvil proporcionó empleo directo a aproximadamente 1 millón de personas y generó otros 1 millón de puestos de trabajo indirectos. Además, contribuyó con 50,000 millones de dólares en recaudación tributaria, principalmente a través de impuestos al consumo y al empleo.

Perspectivas hacia 2030

Para finales de la década, se espera que la contribución económica de la industria móvil en América Latina supere los 600,000 millones de dólares, impulsada por la expansión de 5G y la digitalización de sectores clave. Manufactura, administración pública y servicios serán los principales beneficiarios, con aplicaciones como fábricas inteligentes, redes eléctricas avanzadas y soluciones IoT.

El desafío para la región radica en acelerar el cierre de la brecha digital, fomentar entornos regulatorios favorables y garantizar que la transformación digital beneficie a toda la población, desde grandes centros urbanos hasta comunidades rurales y zonas remotas. En esta ecuación, el ecosistema móvil seguirá siendo el principal catalizador del desarrollo económico y la inclusión digital en América Latina.

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