Terminó un año negro en la bolsa para los gigantes tecnológicos. Tras años de enorme impulso, el mercado de valores ha dado la espalda a Meta, Alphabet, Amazon, Microsoft y Apple, con caídas e inestabilidad durante todo el 2022. Ya con la persiana anual cerrada, estos han sido los datos concretos del ‘big tech crash’ en los parqués, según cifras de Yahoo Finance recogidas por Statista.
Más infografías en StatistaLas acciones de Amazon comienzan 2023 valiendo la mitad que en el arranque de 2022. La situación de las acciones Meta es aún peor, tras haber perdido cerca de dos tercios de su valor.
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La apuesta del gigante de Mark Zuckerberg por el metaverso sigue tiñendo de rojo las finanzas de la compañía. Se calcula que Reality Labs, la división de la empresa encargada de la realidad virtual, registrará pérdidas superiores a los US$10 mil millones en el cierre de 2022. Pese a ello, Meta no tira la toalla y anunció que seguirá destinando el 20 % de su presupuesto a un proyecto al que le está costando despegar en lo financiero. Las miras están puestas en el largo plazo pero, en el presente, las cuentas sufren.
Para profundizar: Meta sigue creyendo: el 20 % de su presupuesto, para el metaverso
En cuanto a Amazon, el gigante del ‘retail ‘se vio impulsado por la pandemia. En 2020, sus ingresos aumentaron hasta los US$386.1 mil millones, un 38 % más que en 2019, mientras que su capitalización bursátil se disparó un 76 %. Ya en 2021, con la crisis sanitaria suavizándose, su valor creció sólo un 2 %, para caer un 50 % en 2022. Una situación que ha llevado a Amazon a reducir su plantilla por primera vez en sus casi tres décadas de historia.
Al igual que en el caso de Amazon, el resto de big techs vieron cómo su valor y sus ingresos aumentaban con la pandemia y sus confinamientos, que hicieron que muchos usuarios se acercaran o aumentaran su exposición a sus plataformas. Por tanto, a medida que el mundo ha ido recuperando la normalidad en el día a día, los gigantes tecnológicos han perdido fuelle.
La subida generalizada de tasas de interés también afectaron al valor de las acciones de estas empresas, ya que los inversores tienden a pensarse muchos más sus movimientos cuando el precio del dinero se encarece. La inflación, la inestabilidad general, y los cambios en las políticas de privacidad, que han golpeado al mercado de anunciantes, también fueron factores que pusieron muy cuesta arriba el camino a las compañías tecnológicas durante el 2022.
Las incógnitas afectan especialmente a este tipo de empresas en bolsa. Las inversiones que reciben están muy ligadas a las expectativas de futuro que ofrecen este tipo de plataformas, que viven en constante evolución. Por tanto, si las dudas oscurecen el horizonte, los inversores empiezan a protegerse.
Si algún sector estaba deseando cerrar de una vez por todas el 2022 y comenzar un nuevo año, eran sin duda el de las grandes tecnológicas. Los datos de capitalización bursátil así lo demuestran.
Borja Santamaría
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