En los últimos seis meses del año, China ha desarrollado una intensa agenda en materia de política exterior. Su presidente, Xi-Jinping se ha reunido con diversos jefes de Estado y empresarios, entre ellos Bill Gates, Elon Musk o Tim Cook, para estrechar lazos políticos y económicos.
A plena luz del día y ante las narices de Estados Unidos y la Unión Europea, el gigante asiático reacomoda sus piezas en un tablero que vuelve a tener dos colores y fuerza al resto de los participantes a tomar postura.
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En un tono de franca amistad, Ebrahim Raisí y Xi-Jinping reafirmaron los lazos de amistad entre ambos países y acordaron acelerar la puesta en marcha de sus planes de cooperación al tiempo que abogaron por la importancia de mantener la paz y la estabilidad en la región del golfo Pérsico «sin importar los cambios en la situación internacional».
Por medio de un comunicado en conjunto, donde ambas naciones se comprometen a «fortalecer» sus relaciones bilaterales, y muestra el apoyo del gigante asiático a que el país persa tenga un rol «mayor» en los asuntos internacionales y regionales.
La visita del presidente del Gobierno español en marzo, de acuerdo con el propio Sánchez, se centró en la reciprocidad en el intercambio comercial entre ambas naciones.
En una rueda de prensa posterior al encuentro entre ambos mandatarios, Pedro Sánchez comentó respecto al ámbito económico y comercial que España le apostará a la búsqueda de un mayor equilibrio en las relaciones, donde se respeten las reglas del juego, exista la transparencia y se garantice reciprocidad en el acceso a los mercados.
España, que le corresponde la presidencia europea durante el segundo semestre del año, “tratará de impulsar las relaciones entre ambas regiones”.
Pedro Sánchez también consideró que China y la Unión Europea están “llamadas a cooperar ante los retos globales”, entre ellos la emergencia climática y el combate contra la violencia y la desigualdad.
En otro espacio, el líder español se reunió con el primer ministro, Li Qiang, quien elogió la relevancia internacional de España.
A puerta cerrada, Sánchez sostuvo un encuentro con empresarios españoles radicados en China para exponer las relaciones bilaterales con el país asiático y dar su visión sobre el futuro de las mismas.
La guerra en Ucrania fue otro de los temas que ambos presidentes abordaron durante su encuentro y donde las posiciones están encontradas.
Tras su regreso a la presidencia en enero da Silva se ha propuesto reivindicar la posición de Brasil en el escenario internacional.
En ese sentido y so pretexto de la guerra en Ucrania, Lula afirmó que “es necesario que Estados Unidos pare de incentivar la guerra” en Ucrania y “comience a hablar de paz”.
“Es necesario que EE.UU. pare de incentivar la guerra y comience a hablar de paz. Es necesario que la Unión Europea comience a hablar de paz para que podamos convencer” (a Putin y Zelenski), de que la paz interesa a todos”.
Con más de una veintena de acuerdos comerciales firmados, Brasil busca poner el foco comercial en las energías renovables, tecnología y la industria agropecuaria.
En abril y luego de la reunión con el representante del Gobierno español, Xi Jinping recibió a Emmanuel Macron y a Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea.
Paz, estabilidad y prosperidad mundial. Tres palabras clave del encuentro entre Macron y Xi; una plática centrada particularmente en la guerra en Ucrania y el papel de China como mediador del conflicto y único posible camino para mediar con Rusia.
Macron comprometió a Xi Jinping al asegurar que «sabe», que cuenta con su apoyo “para hacer que Rusia entre en razón y llevar a todas las partes a la mesa de negociaciones”.
“China favorece hablar de paz, y junto a Francia urgimos a la comunidad internacional a preservar la razón y contenerse actos que deterioren la crisis”, fue parte de la respuesta del presidente chino a su contraparte.
En el marco de la última reunión del G7, Macron instó a sus contrapartes a «rebajar el tono hacia China» en una postura que comparte con Alemania. El presidente francés ha insistido en que esta postura no viene de la «ingenuidad», sino de la voluntad de «dialogar con exigencias» y de evitar «una escalada en las confrontaciones».
En un segundo acto, von der Leyen enfatizó que la posición de China en el conflicto entre Ucrania y Rusia es «crucial», por lo que espera que el gigante asiático promueva la paz “desde el apoyo a la soberanía y la integridad territorial de Ucrania”.
Xi-Jinping describió la situación internacional como compleja y cambiante; «la crisis en Ucrania se prolonga y es difícil de resolver».
“Urgimos a la comunidad internacional a preservar la razón y contenerse actos que deterioren la crisis”, dijo Xi-Jinping.
La funcionaria europea aseguró que Xi le reiteró su voluntad de hablar con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, “cuando se den las condiciones y sea el momento apropiado”.
La visita de la presidenta Xiomara Castro a China fue el banderazo de salida para el establecimiento de relaciones diplomñaticas entre ambos países.
En ese contexto, China y Honduras suscribieron 22 instrumentos para profundizar su relación bilateral y que se irán anunciando durante los próximos meses.
Los memorandums de entendimiento abarcan temas desde el acceso al mercado chino de productos hondureños, el establecimiento de una cooperación y comisiones mixtas en el área económica, entre otros.
Esta cooperación se extenderá a otras áreas como las de cultura, telecomunicaciones, ciencia y tecnología, indicó el alto funcionario hondureño.
El pasado 11 de junioo, Honduras abrió su embajada en Pekín luego de que el 26 de marzo se hiciera formal la ruptura de relaciones con Taiwán.
China y Palestina acordaron elevar sus lazos diplomáticos a la categoría de «asociación estratégica«, una de las varias clasificaciones con las que China define el nivel de sus nexos internacionales.
Así lo informó la agenia de noticias EFE, que también dio cuenta dela visitaque realizó Mahmud Abás a China a a mediados de junio.
La visita del presidente palestino tiene lugar en un momento en que Pekín ha expresado su disposición a facilitar la reanudación de las conversaciones de paz entre Israel y Palestina.
Desde 2019, antes del arribo de la pandemia, Gates no pisaba territorio chino. Ahora, tras su visita el pasado 15 de junio, declaró estar «muy contento de visitar a sus socios» en Asia.
«Para hacer frente a problemas como el cambio climático, las desigualdades sanitarias y la seguridad alimentaria, necesitamos innovación», fueron parte de las primeras declaraciones del fundador de Microsoft, que actualmente dirige la Bill & Melinda Gates Foundation.
Pese a los desencuentros entre ambas naciones, el secretario de Estado alista una visita a Pekín para hablar de la importancia de mantener abierta la comunicación entre ambos países y gestionar su relación bilateral “de forma responsable”.
No está claro si Blinken se reunirá con el presidente chino, Xi-Jinping pero sí lo hará con altos funcionarios con quienes también tratará “temas de interés bilateral, asuntos globales y regionales, y la cooperación potencial en desafíos transnacionales compartidos”.
Gabriel Rico Albarrán
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