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La Dirección General de Aduanas (DGA) de República Dominicana, bajo la dirección de Eduardo Sanz Lovatón, ha sido clave en el desarrollo del país como hub logístico regional. Con la nueva ley de aduanas 168-21, promulgada en 2021, la DGA ha avanzado hacia la modernización y eficiencia del comercio internacional. Así, ha consolidado su papel como garante del comercio exterior.
La ley de aduanas 168-21 marca un antes y un después en el sistema aduanero de República Dominicana. Moderniza un marco legal que estuvo en vigor durante más de 68 años. Esta ley, compuesta por 420 artículos, no solo actualiza las normativas aduaneras, sino que también se alinea con los estándares internacionales. Esto facilita un comercio exterior más ágil y transparente.
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Una de las innovaciones más destacadas de la Ley de Aduanas 168-21 es la reducción del plazo para declarar mercancías importadas, que ahora debe realizarse en un máximo de cinco días hábiles. Esta medida busca agilizar los procesos aduaneros y promover la eficiencia. Además, la ley introduce medidas específicas para apoyar a las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (MiPymes), fomentando su participación en el comercio internacional a través del nuevo Operador Económico Simplificado.
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Para complementar la Ley de Aduanas, el Reglamento 755-22 moderniza los procesos relacionados con la entrada, salida y manejo de mercancías y vehículos en las aduanas de República Dominicana. Este reglamento refuerza las capacidades de la DGA en términos de supervisión, regulación y fiscalización de las operaciones comerciales, asegurando transparencia y cumplimiento de las normativas vigentes.
Una innovación clave del Reglamento 755-22 es la adopción de la firma electrónica digital y la opción de pagos a través de entidades bancarias, lo que simplifica los trámites para los operadores comerciales. Además, el uso del «Sea Waybill» como documento de embarque físico o electrónico contribuye a una gestión más eficiente y moderna del comercio exterior.
La Dirección General de Aduanas sigue siendo un socio estratégico en el desarrollo económico del país. Facilita el comercio exterior y contribuye al crecimiento sostenible. Gracias a la visión de Eduardo Sanz Lovatón y su equipo, la DGA ha posicionado a República Dominicana como un actor clave en el comercio internacional y un hub logístico regional.
Con el comercio exterior en constante evolución, la DGA se mantiene a la vanguardia. Implementa políticas que no solo benefician a las grandes empresas, sino que también apoyan a las MiPymes en su inserción en el mercado global. Esto refuerza el papel de República Dominicana como referente en la región y puerta de entrada al comercio internacional.
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