El «síndrome del trasero muerto» puede parecer un término gracioso y hasta soez, pero es un problema real que afecta a quienes pasan largas horas sentados. Este síndrome se debe a la inactividad de los músculos glúteos, especialmente del glúteo medio.
Esto puede generar problemas serios de salud, como dolor lumbar, en las caderas o piernas. Para entender mejor esta condición y cómo prevenirla, consultamos al Dr. Mario Gestoso García, Jefe de la Unidad de Espalda en Quirónsalud Palma de Mallorca y Director de la Escuela Española de la Espalda (EEDE).
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Según el Dr. Gestoso, el síndrome del trasero muerto ocurre cuando los músculos glúteos dejan de activarse adecuadamente debido a largas horas de inactividad o estar sentado.
«Esto hace que otras áreas del cuerpo, como la espalda baja y las caderas, asuman la carga de trabajo de los glúteos, generando dolor y tensión», explica. Si no se trata a tiempo, este problema puede desencadenar en lumbalgia, dolor en caderas y piernas, desequilibrios musculares y presión en las articulaciones.
Más allá de su función estética, los glúteos son esenciales para la estabilidad del cuerpo. «Unos glúteos fuertes ayudan a distribuir el peso del cuerpo de manera equilibrada, reduciendo el riesgo de desarrollar dolor lumbar», asegura el Dr. Gestoso. Además, fortalecen el equilibrio y la postura, previniendo caídas y lesiones.
Entre los síntomas más comunes de este síndrome se encuentran:
Si pasas muchas horas en la oficina, es crucial prestar atención a la ergonomía. Una silla mal diseñada o una mala postura aumentan el riesgo de padecer el síndrome del trasero muerto. El Dr. Gestoso recomienda hacer pausas cada 30-60 minutos para estirarse o caminar, y usar sillas que ofrezcan buen soporte lumbar.
El estilo de vida sedentario ha empeorado con el aumento del teletrabajo. Según la Organización Mundial de la Salud, más del 60% de los adultos no realizan suficiente actividad física diaria, lo que contribuye al debilitamiento de los glúteos y problemas musculares. «El sedentarismo afecta no solo a los glúteos, sino también a las caderas y la espalda baja, provocando rigidez y pérdida de movilidad», afirma el Dr. Gestoso.
El Dr. Gestoso recomienda hacer pausas durante el día y realizar ejercicios que activen los glúteos. Aquí algunos de ellos:
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