Una sorpresa a nivel mundial ha causado el reciente estudio publicado en la revista The Lancet Public Health referente a las bondades de los audífonos y su repercusión positiva en la salud auditiva. Pero, más allá de eso, sobre la relación que han descubierto tienen estos dispositivos electrónicos con la demencia.
Aunque en 2020, un estudio de la Comisión Lancet estimó que la pérdida de audición se asocia al 8 % de los casos de demencia en el mundo. Ahora, los resultados de este trabajo resaltan la necesidad urgente de introducir audífonos de forma precoz cuando alguien empieza a experimentar problemas auditivos.
Y es que recientemente los científicos han dado por hecho que los audífonos, esos que suelen usar mayormente las personas jóvenes y de mediana edad, actúan como minimizadores y protectores reduciendo considerablemente el riesgo de sufrir esta enfermedad mental.
El estudio partió del hecho de que las personas con pérdida auditiva tienen 1,4 veces más riesgo de desarrollar demencia que quienes no presentan esta deficiencia. Llegando a determinar que, a pesar de la pérdida auditiva, si se utilizan audífonos, no se produce este aumento del riesgo de padecer demencia.
La línea de investigación fue desarrollada por un equipo de investigadores chinos, japoneses, indios y de otros países, que analizó de manera exhaustiva la asociación entre el uso de audífonos y el riesgo de desarrollar demencia. Para ello, utilizaron información de más de 400 000 participantes registrada en la base de datos UK Biobank. Hasta la fecha, pocos trabajos habían analizado esta asociación. Y los que se han desarrollado contaban con un número limitado de participantes o periodos de seguimiento muy cortos.
La edad promedio de los participantes del estudio en el momento del reclutamiento fue de 56 años y el tiempo promedio de seguimiento fue de 12 años.
Alrededor de las tres cuartas partes de los participantes (325.882/437.704) no tenían pérdida auditiva, y la cuarta parte restante (111.822) tenía algún nivel de pérdida auditiva. Entre las personas con pérdida auditiva, el 11,7 % (13.092 / 111.822) usaba audífonos.
Después de controlar otros factores, el estudio sugiere que, en comparación con los participantes con audición normal, las personas con pérdida auditiva que no usaban audífonos tenían un 42 % más de riesgo de demencia por cualquier causa.
Según reseña el portal theconversation.com en las personas mayores, tanto la demencia como la pérdida de audición se asocian a mayor discapacidad, aislamiento social, depresión y, a la postre, mortalidad. Por eso, conocer, determinar y caracterizar adecuadamente los factores que pueden protegernos de ambos trastornos es un desafío para la comunidad científica internacional.
Los autores de esta nueva investigación aducen que se están abriendo nuevas vías en la prevención de la demencia: al atenuar la pérdida de audición, los audífonos disminuyen la carga cognitiva (hacen que nuestro cerebro se esfuerce menos en decodificar los sonidos, lo que deja más recursos para otras tareas como la atención o la memoria) y alivian la privación sensorial. Ambos factores explican en parte el desarrollo de las demencias.
Además, piden una mayor conciencia pública sobre los posibles efectos protectores de los audífonos contra la demencia, una mayor accesibilidad a los mismos mediante la reducción de costos y más apoyo para los trabajadores de atención primaria para detectar deficiencias auditivas, crear conciencia y brindar tratamiento, como la adaptación de audífonos.
De acuerdo con lo publicado en abc.es cada vez hay más pruebas de que la pérdida de audición puede ser el factor de riesgo modificable más impactante para la demencia en la mediana edad; sin embargo, la eficacia del uso de audífonos para reducir el riesgo de demencia en el mundo real no había sido lo suficientemente analizada. Ahora, señala uno de los autores del trabajo, Dongshan Zhu de la Universidad de Shandong (China), «nuestro estudio proporciona la mejor evidencia hasta la fecha que sugiere que los audífonos podrían ser un tratamiento rentable y mínimamente invasivo para mitigar el impacto potencial de la pérdida auditiva y la demencia».
Después de controlar otros factores, el estudio sugiere que, en comparación con los participantes con audición normal, las personas con pérdida auditiva que no usaban audífonos tenían un 42 % más de riesgo de demencia por cualquier causa.
Esto equivale aproximadamente a un 1,7 % de riesgo de demencia en personas con pérdida auditiva que no usan audífonos, en comparación con el 1,2 % entre las personas sin pérdida auditiva o que experimentan pérdida auditiva pero usan audífonos.
Los investigadores también analizaron cómo otros factores, como la soledad, el aislamiento social y los síntomas depresivos, podrían afectar la asociación entre la pérdida auditiva y la demencia.
Normedy Gallardo Monterrey
Suscríbete a la revista y regístrate a nuestros newsletters para recibir el mejor contenido en tu buzón de entrada.
