La macroeconomía mundial lleva casi dos años moviéndose en torno a una variable: la inflación. Sucede en casi todas los países y regiones, una realidad a la que no es ajena América Latina.
Los precios comenzaron a dispararse a mediados de 2022, y supusieron un dolor de cabeza para los bancos centrales durante gran parte de 2023, provocando políticas de subidas de tasas de interés. Afortunadamente, el final del curso pasado invitó al optimismo, con la inflación suavizándose en la mayor parte de las economías.
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¿Cuál es la situación en 2024? Transcurrido el primer trimestre del ejercicio, echamos un vistazo a la evolución de las principales economías latinoamericanas. Estas fueron sus tasas de inflación interanual en el mes de marzo:
Quedan al margen de la gráfica dos países con un problema crónico de inflación: Argentina, con un 287.8 % de inflación interanual, y Venezuela, con un 67.76 %. En el caso argentino, a su tendencia habitual se sumó la decisión del Gobierno de Javier Milei de devaluar el peso un 50 % el pasado 13 de diciembre.
El efecto secundario fue el aumento exponencial de precios. En los primeros tres meses del año se han elevado un 51.6 %.
Dejando a un margen Argentina y Venezuela, la mayor parte de las economías de América Latina se sitúan en un rango entre el 3 % y el 4 % de inflación. Sólo destacan, por arriba, Colombia y Nicaragua, mientras que en El Salvador los precios apenas han variado y Costa Rica muestra deflación.
Las monedas de América Latina: ¿cómo les fue en el primer trimestre de 2024?
República Dominicana se sitúa en la tendencia general de América Latina, y dentro de su rango meta de inflación para el 2024 (4.0 % ± 1.0 %=. El Banco Central de RD tasó el alza de precios en el 3.38 % interanual. En lo que va de curso, la variación ha sido del 0.8 %.
Los datos ofrecidos por la máxima institución financiera del país señalan que la partida de alimentos y bebidas no alcohólicas apenas aumentó sus precios un 0.08 % en marzo.
El transporte fue el segmento que más influyó, con un crecimiento del 0.46 %. Los precios de los boletos de avión, automóviles, servicio de pasaje en motoconcho y de reparación de vehículos tuvieron una incidencia relevante.
«Es relevante mencionar, que las medidas implementadas por el poder Ejecutivo al disponer el subsidio a los combustibles domésticos han tenido un efecto significativo en el comportamiento de este grupo, mitigando su impacto en la variación del IPC general», agrega el Banco Central.
El grupo de comunicaciones fue el que más elevó sus precios en marzo, un 1.08 %, «como resultado de incrementos en los servicios combinados de telefonía, televisión pagada e internet».
Con información del Banco Central de RD
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