En la primera década del siglo XXI el mercado de ejércitos privados se disparó hasta convertirse en un negocio que mueve más de US$100,000 millones.
Las guerras de Irak y Afganistán son consideradas como los dos grandes aceleradores del crecimiento de las compañías militares privadas, según un informe de La Razón.
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Decenas de miles de mercenarios han sido contratados por el Gobierno de EE.UU. o por empresas para proteger a sus empleados e instalaciones allí. Por un lado, usando a soldados privados, los Gobiernos disminuyen el riesgo de que sufran bajas sus tropas nacionales.
Pero por otro lado, el empleo de mercenarios siempre está relacionado con ciertos dilemas éticos. Los grupos paramilitares actúan con violencia a la sombra del Estado o de manera independiente.
Pueden apoyar a las fuerzas oficiales, surgir de comunidades que se organizan, formar escuadrones de la muerte o actuar como compañías privadas.
¿Quiénes son los principales actores en este mercado y dónde actúan?
Es una organización paramilitar independiente del Ejército ruso pero que se sirve de su munición y entrenamiento. De acuerdo con el presidente Putin el grupo recibió ₽86.260 millones de rublos (unos US$1,000 millones) del Estado ruso entre mayo de 2022 y 2023 para pagar a su personal.
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos asegura que las empresas del recientemente malogrado Prigozhin obtuvieron beneficios en muchos lugares en los que opera Wagner, como las minas de oro y diamantes de la República Centroafricana y Sudán, y los campos de gas y petróleo de Siria.
Wagner está presente en Libia del lado del general Jalifa Haftar, en Mali contra las milicias islámicas.
En Ucrania participó en la anexión de Crimea, apoyó a las fuerzas separatistas en el Donbás y fue un actor clave en la invasión actual.
Academi es el principal contratista de Estados Unidos. Se conoce mejor por su antiguo nombre, Blackwater, cambiado después de varios grandes escándalos por matanzas de civiles en Irak y Afganistán.
La empresa, fundada en 1997, firmó el primer contrato (27,7 millones de dólares) con el Pentágono para el envío de sus tropas a Irak en 2003. Un año más tarde, ya recibió unos 320 millones de dólares por sus servicios.
En total, hasta 30.000 empleados de esta empresa contratados por EE.UU. pasaron por Irak. Hubo una “secuela”, si se quiere, de esta empresa, llamada Triple Canopy, creada en 2003 por un grupo de veteranos de las fuerzas especiales de EE.UU., que entró en acción en abril de 2009, cuando Blackwater estaba bajo investigación.
Sus ontratos con Washington en Irak le fueron asignados a Triple Canopy para no dejar de facturar.
Actualmente las tropas de Canopy cuentan con 1.800 soldados desplegados en Irak, con un contrato de 1.500 millones de dólares.
Además tiene varios miles de soldados alrededor del mundo, protegiendo incluso algunas instalaciones nucleares.
En 1901 el danés Marius Hogrefe creó una pequeña empresa de seguridad que con el tiempo se transformó el gigante G4S.
La empresa se mudó al Reino Unido al cabo de las décadas, tomando su actual forma en 2004 cuando la empresa londinense Securicor se amalgamó con el grupo danés 4 Falck.
La compañía ofrece una gama de servicios, incluyendo el suministro de personal de seguridad, equipos de monitoreo, unidades de respuesta y transporte seguro de prisioneros. G4S también trabaja con gobiernos en el extranjero para brindar seguridad.
En la actualidad, la mayor parte de su negocio son servicios de seguridad en bancos y aeropuertos por todo el mundo, pero también está presente en la protección de prisiones, puestos de control y asentamientos de Israel en Cisjordania.
Además, G4S se encargó de la seguridad durante los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Es la compañía de seguridad más grande del mundo medida por los ingresos y tiene operaciones en alrededor de 125 países.
Con 618.000 empleados, es el tercer mayor empleador privado del mundo, el mayor empleador privado europeo y africano, y uno de los más grandes de la Bolsa de Londres. G4S tiene una lista primaria en la Bolsa de Valores de Londres y es un componente del índice FTSE.
La compañía con sede en Perú, también tiene oficinas en países como Emiratos Árabes e Irak. Generalmente se dedica a reclutar contratistas latinoamericanos para misiones por todo el mundo.
Aumentó su capital entrenando al personal de otra compañía militar privada, Triple Canopy, para la guerra de Irak. Envió a unas 3.000 personas a Bagdad.
Esta compañía ha participado en misiones militares en unos 40 países, contratada por 20 Gobiernos e incluso por Naciones Unidas.
Fundada en 2002 en Inglaterra, ahora tiene oficinas también en EE.UU., Afganistán y Bahréin y tiene unos 5.000 empleados. Aegis está presente en Irak, contratada por el Pentágono por casi US$300 millones.
En 2005 se difundió un vídeo que supuestamente muestra a los mercenarios de Aegis disparando contra civiles iraquíes.
Curiosamente, es signatario fundador del Código Internacional de Conducta para Proveedores de Seguridad Privada, inaugurado el 9 de noviembre de 2010, una iniciativa de múltiples partes interesadas convocada por el gobierno suizo que tiene como objetivo aclarar los estándares internacionales para la industria de la seguridad privada que opera en entornos complejos, como así como para mejorar la supervisión y la rendición de cuentas de estas empresas ”.
En 2015, GardaWorld anunció la adquisición de Aegis Defense Services para expandir su expansión estratégica en África y Oriente Medio. La adquisición se completó el 12 de octubre de 2015 por $ 130 millones.
Artículo publicado en la edición de octubre de revista Mercado
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