El actual flujo generacional está tejiendo una nueva narrativa en el mundo financiero. Los líderes emergentes, criados en la era digital, irrumpen en la escena con una mentalidad fresca. Este cambio no sólo representa una evolución en la estructura del liderazgo, sino también una revolución en la forma en que se concibe y se implementa la estrategia financiera y la posición de CFO (Chief Financial Officer).
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El rol de CFO se encuentra en el corazón de la organización y brinda una visión de 360 grados, no sólo de la función financiera, sino también de otros equipos, proyectos y programas. Esto significa que es esencial que los ejecutivos financieros que tienen el ojo puesto en el cargo más alto aprendan a asociarse y colaborar con sus colegas, tanto internos como externos.
En la actualidad se ha incrementado la expectativa de que los CFO desempeñen un papel fundamental como asesores y socios estratégicos de CEO, colaborando estrechamente en iniciativas clave de negocios, estratégicas y de transformación. Este enfoque implica trabajar en conjunto en proyectos críticos que abarcan diversas áreas, como el cumplimiento normativo relacionado con cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza.
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Ningún candidato a director financiero llegará muy lejos sin un conocimiento avanzado de datos, análisis y los últimos desarrollos, como la IA generativa. A medida que las organizaciones luchan por obtener una ventaja digital, es un requisito previo que se extiende a un número cada vez mayor de roles.
Desarrollar un perfil con conocimientos comerciales permitirá a los nuevos directores financieros identificar oportunidades para la organización (así como cuestiones de interés) desde el principio, y proporcionará otra herramienta más para que los líderes financieros impulsen resultados en función de los objetivos de desempeño. La experiencia comercial también agregará profundidad a la relación con el CEO al ayudar al CFO a ser más estratégico, al mismo tiempo que fortalecerá las relaciones con áreas no financieras del negocio, como comunicaciones y marketing.
Los directores financieros de próxima generación deben adaptarse a un mundo donde el éxito financiero está cada vez más vinculado a un desempeño líder en sostenibilidad. Tendrán que comprender la evolución de las divulgaciones relacionadas con ESG, el camino hacia Net Zero y también todos los asuntos relacionados con la gobernanza, la diversidad, la equidad y la inclusión.
Ser líder implica hacer malabarismos con una infinidad de tareas y responsabilidades, crisis y oportunidades en competencia. Para este fin, los CFO no necesitan ser expertos en todas las especialidades que tienen a su cargo, pero necesitan saber lo suficiente para contratar a las personas adecuadas para ese trabajo y deben ser capaces de reconocer el talento, incluso en aquellas áreas en las que ellos mismos carecen de conocimientos profundos.
Reportaje publicado en la edición de marzo de revista Mercado
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