La trampa del perfeccionismo en el entorno laboral
Amadita

De Sísifo a la Sisifemia: La trampa del perfeccionismo en el entorno laboral

Por | mayo 6, 2024

En la vorágine de la vida moderna, el perfeccionismo y el deseo de sobresalir y ser más productivos que los demás llevan a muchas personas a asumir enormes cargas tanto laborales como personales. Esta tendencia está impulsada por la creencia de que solo a través de un esfuerzo incesante se puede alcanzar una meta cada vez más esquiva, sin darse cuenta del desgaste físico y mental que implica tal nivel de autoexigencia.

De acuerdo con el estudio Cigna 360-Vitality, más de la mitad (57%) de las empleadas encuestadas reporta carecer de un bienestar laboral adecuado, y el 31% admite sentirse estresada debido a una carga de trabajo excesiva. Esta presión, ya sea externa o autoimpuesta, está afectando la salud mental de muchas trabajadoras, llevando a un malestar crónico que se manifiesta en forma de cansancio, falta de motivación, ansiedad, depresión, sensación de angustia y una obsesión por el trabajo, entre otros síntomas.

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Este fenómeno laboral se conoce como sisifemia, un trastorno que surge cuando se establecen objetivos diarios inalcanzables, los cuales, combinados con una carga de trabajo elevada, resultan en la frustrante sensación de no poder completar ninguna tarea a pesar del gran esfuerzo dedicado. En este contexto, es común caer en el llamado leavism, que consiste en usar parte del tiempo de ocio para trabajar, intentando así gestionar las tareas que no se logran completar durante la jornada laboral.

El mito de la productividad absurda

Sísifo, un personaje de la mitología griega, fue condenado a una tarea interminable: empujar una roca colina arriba solo para verla rodar de nuevo hacia abajo cada vez que se acercaba a la cima. Esta labor sin fin fue su castigo eterno. En 1942, Albert Camus reinterpretó este mito en su obra «El mito de Sísifo», comparando la condena de Sísifo con la vida moderna, en la que aceptamos trabajar largas jornadas en oficinas, realizando tareas repetitivas sin considerar las consecuencias de tal rutina. Una clara señal de perfeccionismo.

Más allá de los mitos, la realidad es que el entorno laboral actual, marcado por una alta competitividad y una sobrecarga de trabajo, ha hecho que algunas trabajadoras sientan que están atrapadas en un ciclo interminable de tareas, sin importar cuánto se esfuercen. En este contexto, es crucial que las empresas asuman un papel activo para ayudar a sus empleadas a superar esta constante presión y gestionarla adecuadamente para prevenir el estrés y problemas de salud más serios.

5 estrategias para evitar la sisfemia

Promover una cultura organizacional preventiva

Fomentar un ambiente laboral que priorice el bienestar físico y mental de las empleadas es esencial para cultivar una cultura empresarial positiva. Esta estrategia puede mejorar la moral, la satisfacción en el trabajo y la retención de talento. La prevención del perfeccionismo juega un papel crucial en evitar que el estrés cotidiano se convierta en trastornos más serios como la sisifemia. Las empresas pueden implementar programas de salud mental que incluyan asesoramiento, apoyo emocional, sesiones de mindfulness o yoga, y la promoción de un equilibrio saludable entre trabajo y vida personal.

Definir expectativas realistas

Para evitar situaciones que generen estrés laboral, es vital comunicar claramente las responsabilidades a los empleados y establecer objetivos realistas que se revisen y ajusten regularmente. Promover una cultura de apoyo y colaboración, junto con canales de comunicación abiertos y transparentes, es esencial. Escuchar las preocupaciones de las empleadas, proporcionar retroalimentación continua y mantenerlas informadas sobre los objetivos y cambios de la empresa ayuda a que se sientan valorados y parte integral de la organización.

Seguir la regla de las 3 R: Reconocimiento, Recompensa y Retroalimentación

Reconocer el esfuerzo y los logros de las empleadas es fundamental para mantener su motivación y compromiso. Esto contribuye a crear un ambiente laboral seguro, donde las empleadas se sientan apoyadas incluso cuando cometen errores. Cigna Healthcare sugiere programas de reconocimiento, retroalimentación positiva y oportunidades de desarrollo profesional para prevenir el agotamiento y fomentar la retención de talento. De este modo se combate el perfeccionismo.

Capacitar en la gestión eficaz del tiempo y establecimiento de límites

Es crucial que las empleadas aprendan a gestionar su tiempo eficientemente y a establecer límites saludables entre el trabajo y la vida personal. Las empresas pueden ofrecer herramientas para identificar prioridades, planificar tareas de manera efectiva y evitar la procrastinación. Hoy en día, existen muchas aplicaciones diseñadas para este propósito que las empresas pueden proporcionar a sus empleadas.

Favorecer la autonomía y flexibilidad

Permitir que los empleados tengan autonomía y control sobre la planificación de su trabajo, así como flexibilidad en horarios y lugar de trabajo, puede reducir la sensación de estar atrapado en una rutina interminable y aumentar el sentido de propósito y logro personal. Además, la rotación de tareas ayuda a evitar la monotonía y brinda la oportunidad de adquirir nuevas habilidades y experiencias.

Implementando estas estrategias, las empresas no solo promoverán un ambiente laboral más saludable y equilibrado, sino que también mejorarán la productividad y la satisfacción general de sus empleados. Con estas cualidades queda anulado cualquier sentido de perfeccionismo en las colaboradoras.

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