Deporte, salud y networking: el trío ganador que vive en una cancha de pádel

Nacido en México y popularizado en España, el pádel ha aterrizado con fuerza en República Dominicana, conquistando no solo canchas sino también las emociones de quienes lo juegan. Aunque su impacto en la condición física es innegable, lo que ha convertido al pádel en un fenómeno en ascenso es su capacidad para fortalecer los vínculos humanos, tejer redes y promover bienestar mental y social.

Conexión y comunidad: la verdadera fuerza del pádel

A diferencia de deportes más competitivos o individuales, el pádel se juega casi exclusivamente en dobles, lo que lo convierte en una plataforma natural para la interacción social. “Aquí uno no solo viene a jugar. Viene a conocer, compartir, cerrar negocios o simplemente desahogarse”, explica Eduardo Gadala, presidente de la Asociación Nacional de Pádel en una entrevista a los medios.

Este componente social ha permitido que ejecutivos, emprendedores y profesionales de salud encuentren en el pádel un punto de encuentro estratégico. Las conversaciones post-partido —que van desde consejos médicos hasta alianzas comerciales— convierten a las canchas en nuevos espacios de networking con retorno emocional y financiero.

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Datos que hablan: crecimiento y beneficios

Desde 2020, el número de canchas de pádel en el país ha crecido más de un 400 %, según datos de la Real Federación de Pádel de la República Dominicana. Y no es casualidad: el deporte combina ejercicio cardiovascular, coordinación y reflejos sin requerir un nivel atlético extremo. Esto lo vuelve atractivo para un amplio rango etario y perfiles de condición física.

Pero su beneficio va más allá del físico. De acuerdo con un estudio del Journal of Sports Sciences (2023), la práctica regular de pádel mejora significativamente los niveles de serotonina y oxitocina —hormonas clave en la regulación del ánimo y la conexión social—. No es coincidencia que los jugadores frecuentes reporten mayores niveles de satisfacción personal y sentido de pertenencia.

Inclusión y responsabilidad: el caso de Fundación Padelalma

Una de las iniciativas más destacadas es la Fundación Padelalma, liderada por Julie Pérez y Laura Gutiérrez. Este proyecto promueve la inclusión social de jóvenes de bajos recursos mediante formación deportiva, acompañamiento educativo y apoyo alimentario.

“Apoyamos a estos chicos no solo como deportistas, sino como ciudadanos. El pádel es un medio para que sueñen más alto”, cuenta Pérez. Esta labor subraya cómo el deporte puede integrarse de manera profunda en los modelos de salud comunitaria y desarrollo humano.

Pádel y salud mental: una fórmula probada

En una sociedad que ha enfrentado retos emocionales y sociales post-pandemia, el pádel representa una alternativa saludable para combatir el aislamiento y el estrés. La psicóloga deportiva Lía Hernández señala a los medios que “los deportes sociales como el pádel mejoran los niveles de autoestima, reducen la ansiedad y fortalecen las habilidades de comunicación y resolución de conflictos”.

De ahí que cada vez más clínicas y centros de salud estén recomendando actividades como el pádel dentro de programas de bienestar integral.

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¿Por qué está ganando tanto terreno en el mundo de la salud y los negocios?

1. Es accesible: con un aprendizaje rápido y exigencia física moderada, puede practicarse desde la adolescencia hasta la adultez mayor.

2. Fomenta el networking: en cada partido se crean vínculos personales y profesionales que trascienden la cancha.

3. Mejora el bienestar emocional: libera tensiones, reduce el cortisol y mejora la salud mental.

4. Promueve la inclusión: gracias a proyectos como el pádel adaptado y las fundaciones de base social.

5. Fortalece comunidades: los clubes de pádel se han convertido en nuevos centros de cohesión urbana.

El futuro: de las canchas al ecosistema de salud integral

En República Dominicana, el pádel ya no es un pasatiempo, es una herramienta de bienestar. Su crecimiento no solo está remodelando el panorama deportivo, sino también transformando la forma en que abordamos la salud preventiva, la inclusión social y la productividad en los negocios.

Como bien afirma Ernesto Martínez, de la Real Federación de Pádel: “No estamos viendo solo el nacimiento de un deporte popular. Estamos construyendo una cultura donde el movimiento y la conexión son la mejor receta para una vida plena”.

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