La salud pública fue una de las protagonistas en la edición 54º del Foro Económico Mundial de Davos, donde se resaltó una intervención que lleva por título «Preparándose para la enfermedad X», a cargo del director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, y otros expertos prominentes.
La ‘enfermedad X’ no se refiere a una patología específica, sino que representa la denominación dada a un patógeno desconocido con potencial para desencadenar una grave pandemia internacional.
Esta patología podría resultar 20 veces más mortífera que la pandemia del coronavirus.
Es un término adoptado por la OMS en 2018 para describir la probabilidad real de que se origine una pandemia, por lo que se requiere una preparación adecuada de los sistemas de salud a nivel mundial.
Según la entidad sanitaria, la inclusión de este concepto en la estrategia de enfermedades prioritarias tiene como objetivo asegurar que los planes de vigilancia e investigación epidemiológica sean lo suficientemente flexibles para abordar epidemias aún desconocidas.
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En términos de preparación, se han llevado a cabo diversas investigaciones científicas para desarrollar herramientas que prevengan, detecten y combatan la transmisión de la ‘enfermedad X’ en el futuro. Se han identificado estrategias clave, como la reducción del riesgo de contacto con reservorios naturales de virus desconocidos, mejoras en la vigilancia de enfermedades en humanos y animales, detección y secuenciación rápida de agentes infecciosos, fortalecimiento de programas de investigación, aceleración de la implementación de medidas farmacéuticas y no farmacéuticas, y desarrollo de protocolos internacionales para la distribución justa y global de fármacos y vacunas.
Se ha manejado la hipótesis de que podría surgir de la transmisión zoonótica de un virus de RNA altamente virulento.
Adicionalmente, se ha discutido la posibilidad de que este se origine por el desarrollo de virus sintéticos mediante tecnologías de edición genética o la expansión de enfermedades bacterianas debido a la resistencia a los antibióticos.
La organización ha identificado ocho enfermedades prioritarias, entre las que se encuentran la Covid-19, la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo, la enfermedad por el virus del Ébola y la enfermedad por el virus de Marburg, la fiebre de Lassa, el síndrome respiratorio de Oriente Medio por coronavirus (MERS-CoV) y el síndrome respiratorio agudo severo (SARS), Nipah y enfermedades henipavirales, fiebre del Valle del Rift y Zika.
En ese tenor, la OMS ha anunciado la creación de una lista actualizada de patógenos prioritarios para el primer semestre de este año, abordando aquellos que podrían plantear amenazas epidémicas y pandémicas.
«No es una lista exhaustiva ni indica las causas más probables de la próxima epidemia, sino que las enfermedades mencionadas son aquellas que plantean el mayor riesgo para la salud pública por su potencial epidémico y si no existen contramedidas o son insuficientes”, afirmaron.
