Reflejo de la historia de marcas como Bugatti, Ferrari, Koenigsegg y Pagani, entre otros, estos vehículos son el testimonio vivo y herencia de sus creadores y CEO.
Accede a las historias más relevantes de negocios, bienestar y tecnología. Entérate de nuestros rankings y eventos exclusivos. Suscríbete y recibe en tu correo el mejor contenido de Mercado.
Precio: entre 52 millones de dólares (44,17 millones de euros) y 70 millones de dólares (59,4 millones de euros)
El Ferrari 250 GTO 1963 está considerado como uno de los mejores automóviles de alto rendimiento del mundo. No en vano ha participado en numerosas competiciones (entre ellas el Tour de Francia de Automóviles del año que le da nombre).
Esta joya de la escudería italiana, producida entre 1962 y 1964, es ya un clásico de coleccionista, por el que en 2013 un comprador anónimo pagó 52 millones de dólares (44,1 millones de euros). Ahora, cotiza al alza: se calcula que su precio puede rondar los 70 millones de dólares (59,4 millones de euros).
Precio: 28 millones de dólares (23,7 millones de euros)
El Rolls-Royce Boat Tail recibe su nombre porque el diseño de su parte trasera imita la popa de un barco. Nada tiene que envidiar a los yates más caros del mundo: en sus 5,7 metros de eslora (por continuar en términos náuticos) cuenta con el espacio necesario para tomarse un champán y degustar un buen caviar (con enfriador incluido). Y para que no moleste el sol, una sombrilla que sale de su maletero. De su mecánica poco ha trascendido, salvo que incluye un motor 6.75 V12 biturbo con 563 CV.
¿Y su precio? 28 millones de dólares (23,7 millones de euros).
Precio: 18,7 millones de dólares (15,8 millones de euros)
Presentado en el Salón del Automóvil de Ginebra en 2019, La Vouiture Noire es homenaje al modelo clásico Type 57 SC Atlantic, desarrollado entre los años 1936 y 1938. Se trata de una edición única que fue vendida a un cliente desconocido por 18,7 millones de dólares (15,8 millones de euros).
Dicen los rumores que podría tratarse del magnate austríaco Ferdinand Piëch, antiguo jefe del Grupo Volkswagen, o el futbolista, Cristiano Ronaldo. Entre sus características destaca una carrocería de carbono pintada a mano en un color negro brillante y un motor con 1.500 caballos de potencia.
Precio: 9 millones de dólares (7,6 millones de euros)
Con este modelo, la marca de automóviles francesa rindeo homenaje al EB110, también conocido como el Centodieci, un deportivo producido a principios de los 90 que entonces no funcionó como se esperaba. Esta exclusiva versión (solo existen 10 unidades), en cambio, sí parece haber conquistado a los amantes del volante. Cuenta con un motor de 16 cilindros de 8.0 litros y cuatro turbos, prácticamente 1600 caballos, velocidad máxima de 380 km/h y aceleración de 0 a 100 km/h en 2,4 segundos.
Precio: 8 millones de dólares (6,7 millones de euros)
La marca alemana también consigue colarse en la lista de los coches más caros del mundo con el Exelero, creado en 2005 por encargo del fabricante de neumáticos Fulda Tyres. El objetivo de su fabricación fue probar las prestaciones a gran escala de los nuevos neumáticos de alto rendimiento para competición de esta marca.
La firma solo hizo 200 unidades. Este deportivo cuenta con un capó largo bajo que alberga un motor V12 de hasta 700 CV y, aunque es más lento que sus competidores en aceleración, pasa de 0 a 100 km/h en 4,4 segundos, es capaz de alcanzar igual los 351 km/h de velocidad máxima pese a su peso, de 2,66 toneladas.
Precio: 5 millones de dólares (4,24 millones de euros)
Este biplaza es una evolución del Bugatti Chiron de edición limitada a 40 unidades. Cuenta con una potencia de 1.500 caballos, aceleración de 0 a 100 en 2,4 y velocidad punta de 380 km/h.
Se desconoce quienes lo han comprado. No obstante, así como explicó su coordinadora de ventas Anne Bynat, el proceso de personalización de los vehículos ha sido relativamente sencillo, ya que sus dueños ya tenían al menos un Chiron.
Precio: 4,8 millones de dólares (4 millones de euros)
Su motor V8 de 4.8 litros es responsable con el medioambiente (ha sido adaptado al uso de biocombustibles en un 85%). Tiene una potencia de 1.018 caballos, y una aceleración en 2.9 segundos de 0 a 100 km/h y velocidad máxima de 410km/h. Entre sus atractivos destaca su singular manera de reflejar el sol sobre la carrocería Trevita, abreviatura sueca que se traduce en «tres blancos»: brilla como si millones de pequeños diamantes blancos estuvieran infundidos dentro de la carrocería de fibra de carbono.
Precio: 4,5 millones de dólares (3,8 millones de euros)
Basado en el diseño del Lamborghini Aventador, que buscaba la máxima eficiencia aerodinámica para tener una experiencia aún más cercana a la conducción de un coche de carreras, el Lamborghini Veneno copia de este el chasis y sistema de propulsión, pero mejora su motor (de V10 a V12 de máximo 750 CV a 8.400 revoluciones). Además, añade como característico un alerón trasero movible a tres posiciones.
En octubre de 2013 se reveló una misma versión del deportivo en descapotable, el llamado Lamborghini Veneno Roadster, del que se hicieron nueve ejemplares. Junto a los tres del coupé hacen de esta edición una oferta limitada de doce unidades.
Precio: 3,9 millones de dólares (3,3 millones de euros)
A principios de este año Bugatti anunció un nuevo modelo del Chiron Sport que pretendía superar las 300 millas por hora (480 km/h). La producción de 30 unidades ya se ha iniciado. Destaca en él la carrocería fluida y los motivos de rayas.
Precio: 3,6 millones de dólares (3 millones de euros)
Así como el modelo Lamborghini Veneno, el Sian está también inspirado en el Aventador SVJ. Su principal diferencia con su seguidor es su motor.
Se trata del primer coche híbrido de la marca. Esto se demuestra en el número de caballos, más bajos de media, 819 CV con un motor V12 atmosférico. Está serie cuenta 63 unidades, en referencia al año de fundación de Lamborghini en 1963. (M.J)
Suscríbete a la revista y regístrate a nuestros newsletters para recibir el mejor contenido en tu buzón de entrada.
