Entre las computadoras más avanzadas del mundo, se encontrará la supercomputadora de inteligencia artificial AI Research SuperCluster (RSC) construida por Meta, empresa matriz de Facebook y liderada por el magnate tecnológico Mark Zuckerberg.
Este ordenador estará completamente construido a mediados de 2022.
La máquina se especializará en inteligencia artificial debido a que la IA puede realizar tareas como traducir texto entre idiomas y ayudar a identificar contenido potencialmente dañino, sin embargo, para desarrollar la próxima generación de esta tecnología se requerirá supercomputadoras potentes capaces de realizar quintillones de operaciones por segundo.
RSC ayudará a los investigadores de IA de Meta a construir mejores modelos de IA que puedan aprender de billones de ejemplos; trabajar en cientos de idiomas diferentes; analice sin problemas texto, imágenes y video juntos; desarrollar nuevas herramientas de realidad aumentada y más.
En última instancia, el trabajo realizado con RSC allanará el camino hacia la creación de tecnologías para la próxima gran plataforma informática: el metaverso, donde las aplicaciones y los productos impulsados por IA desempeñarán un papel importante.
La supercomputadora construida por Meta ayudará a mantener a las personas seguras en los servicios de la empresa no solo en el presente, sino también en el futuro, a medida que construyen para el metaverso. Mientras RSC pasa a su siguiente fase, la matriz de Facebook e Instagram planea que se haga más grande y más potente, a medida que sientan las bases para el metaverso.
Desde 2013, la gigante tecnológica liderada por Zuckerberg ha logrado avances significativos en este ámbito, incluido el aprendizaje autosupervisado (los algoritmos pueden aprender de una gran cantidad de ejemplos y transformadores sin etiquetar), lo que permite que los modelos de IA razonen de manera más efectiva al enfocarse en ciertas áreas de su entrada.
Para aprovechar plenamente los beneficios de la inteligencia artificial avanzada, varios dominios, ya sea la visión, el habla o el lenguaje, requerirán la capacitación de modelos cada vez más grandes y complejos, especialmente para casos de uso críticos como la identificación de contenido perjudicial.
A principios de 2020, la empresa decidió que la mejor manera de acelerar el progreso era diseñar una nueva infraestructura informática: RSC.
(Con información de Meta/pfm)
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