Suena irónico, pero pudiera fungir como una buena estrategia, y, después de todo, Apple está diseñado para pensar diferente. Insertándose en la realidad o ‘covidianidad’, la multinacional estadounidense elige ver oportunidades tras el impacto de la pandemia causada por el covid-19, expandiendo sus operaciones minoristas y apostando por el poder de sus tiendas físicas.
«Estamos viendo este momento como una forma de comenzar realmente de nuevo, y comenzar de nuevo en todos los sentidos»
La vicepresidenta senior de comercio minorista de Apple, Deirdre O’Brien, preparaba sus operaciones para la apertura de la segunda nueva tienda minorista de Apple en Estados Unidos desde hace más de un año, según informa Reuters
Ante la incertidumbre, la empresa de la manzana mordida planea conservar aquellas estrategias de mercadeo que dieron frutos y ayudaron a la interacción con sus clientes durante el punto más crítico de la pandemia; sin embargo, también tienen en agenda duplicar sus métodos prepandémicos y hacer de una visita a sus tiendas de una experiencia inolvidable.
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Apple mantendrá los mostradores exprés, los cuales nacieron para hacer de la recogida de pedidos en línea una práctica más eficiente, en sus más de 500 tiendas alrededor del mundo.
Resulta interesante el aftermath de la decisión de Apple, pues en medio de una sociedad obligada (y acostumbrada) a hacer su vida en línea, dar apertura a una cantidad importante de tiendas físicas suena riesgoso.
Para agosto 2020, la tecnológica alcanzó los $ 2 billones de dólares estadounidenses en capitalización de mercado, suponiendo un crecimiento considerable durante la pandemia e incluso estableció un récord de ventas en teléfonos móviles.
Pese a los contratiempos surgidos en el proceso de adaptación, como el declive en la venta del seguro AppleCare (usualmente impulsado por ventas físicas), la ralentización de la cadena de suministro y la escasez global de semiconductores, Apple tuvo éxito minorista gracias a la optimización de los procesos de compra en línea y envío.
«Queremos asegurarnos de que puedan entrar y obtener rápidamente el producto que desean. Pero queremos asegurarnos de que también podamos tener una conversación rápida con ellos para asegurarnos de que tengan todo lo que necesitan», afirma O’Brien sobre la nueva experiencia en las tiendas físicas.
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