Previo al impacto de la pandemia a principios de 2020, el acceso desigual a la internet ya era una realidad en la República Dominicana, al igual que en otros países de la región. Sin embargo, la brecha digital creció aún más cuando una de las consecuencias de la crisis sanitaria fue el avance repentino de la virtualidad.
«Durante la pandemia, los migrantes han demostrado un compromiso inquebrantable con sus familias y comunidades; nunca antes se habían realizado tantas transferencias de remesas por medios digitales», expuso Gilbert F. Houngbo, presidente del Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola de Naciones Unidas (Fida). Sin embargo, las familias en zonas rurales afrontan dificultades para acceder a alternativas convenientes para retirarlas.
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Tras la segunda fase de Encuestas Telefónicas de Alta Frecuencia (HFPS) realizada por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en América Latina y el Caribe (PNUDLAC) junto al Banco Mundial (BM), ha concluido que casi un 60% de los hogares dominicanos han reportado inconvenientes para conectarse al internet este año.
En su mayoría, los usuarios reclamaron la mala calidad y velocidad deficiente.
El estudio detalla: «Los altos costos, los cortes de energía y la mala calidad de la conectividad son los desafíos más importantes que enfrentan los hogares para acceder y utilizar Internet. Si bien la conectividad a Internet fue una herramienta de mitigación clave para que los hogares puedan hacer frente a los efectos negativos de la pandemia, existen importantes desafíos al intentar acceder a él».
Dada la magnitud de los cambios, en términos de ventajas competitivas, que las tecnologías digitales pueden ofrecer a quienes las adoptan, los países en desarrollo tienen la oportunidad de aprender de la experiencia de aquellas naciones que van a la vanguardia, al tiempo que diseñan políticas que respondan a sus propias necesidades y se ajusten al contexto local.
Bajo este panorama es que nuestro país y, a través del mandato de la Cámara de Diputados, se aprobó un contrato de préstamo por un monto de US $115 millones, financiados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), para el Programa de Mejora de la Conectividad para la Transformación Digital en la República Dominicana.
El objetivo es mejorar la conectividad para acelerar el acceso, la adopción y la continuidad de servicios digitales. En ese sentido, este programa financiará inversiones para expandir la infraestructura de banda ancha, incluida la expansión de redes troncales, de agregación y de acceso, que permitan mejorar la conectividad de los ciudadanos, al igual que reducir el acceso desigual a la internet. (pfm/rm)
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