Soy un optimista de la tecnología. Cubrir los grandes eventos de las tecnologías de la información por los últimos 10 años me ha hecho convertirme en un convencido de los beneficios que las innovaciones y disrupciones tienen en la composición social, la competencia económica, el debate público y la propagación de la cultura.
Sin embargo, no soy ciego a los peligros que el ciberespacio depara para quienes agotamos la mitad de la vida entre sus fortalezas digitales. Así como las probabilidades de ser víctimas de delincuentes mientras transitamos por las calles de nuestras ciudades están allí y son reales, de la misma forma es posible ser agredido en internet, en nuestras sedes digitales.
El peligro que los hackers representan para las personas, las empresas y los gobiernos ha costado miles de millones de dólares en pérdidas de información, negación de servicios diversos y pagos de extorsión, lo que sin lugar a dudas se erige en el principal problema de seguridad que enfrenta el mundo.
A medida que todos los sistemas migran al espacio digital, más vulnerables somos de ser atacados por delincuentes tecnócratas, desconocidos y lejanos, puesto que si algo en este mundo carece de fronteras, eso es internet.
Revista Technology, en su edición mayo-junio de 2023, presenta The big bad hackers, un compendio de las agrupaciones de bandoleros digitales más destacada del planeta, basándose en papers universitarios, de los organismos de inteligencia a nivel global y expedientes judiciales abiertos en infinidad de países, los cuales señalan quienes se han propuesto lucrarse de las debilidades de ciberseguridad, cuáles métodos utilizan para vulnerar esas defensas y con qué fines hacen lo que hacen.
Caminando por el bajo mundo de la ciberseguridad, me he dado cuenta de que los motivos son de lo más diversos: desde la acumulación de ganancias por vías de la extorsión, hasta la presión política, aunque las pocas legislaciones dedicadas a perseguir en específico estos delitos informáticos no hacen acepción de los objetivos de las personas.
La inteligencia artificial sigue siendo el tema de conversación. La IA es en definitiva el tópico de 2023, pero la computación cuántica, aquella que usa qubits en vez de bits, será en definitiva el tema caliente de 2024. Preparándonos para ese aluvión informativo, conversamos con Ahmet Erdemir, un científico que nos explicó cómo la computación cuántica puede salvar nuestras vidas. La movilidad eléctrica, la ciberseguridad, entre otros temas, no se quedan.
¡Bienvenidos a la edición mayo-junio 2023 de revista Technology!
