La reforma de la Constitución: Un objetivo clave para Abinader

Por | mayo 24, 2024

En un escenario político marcado por la victoria del presidente reelecto Luis Abinader en las elecciones presidenciales, se ha destacado su firme compromiso con la introducción de una reforma constitucional en la República Dominicana.

La Constitución de República Dominicana es la ley fundamental que establece las bases del ordenamiento jurídico y político del país. Es el documento que rige la convivencia de los ciudadanos, define los derechos y deberes de las personas, así como la organización y funcionamiento del Estado dominicano.

En ese contexto, Abinader enfatizó la necesidad de establecer salvaguardas constitucionales que impidan la modificación de los términos de elección y reelección presidencial, así como la creación de un Ministerio Público independiente, elementos cruciales para fortalecer la democracia y el Estado de derecho en el país.

El mandatario expresó su convicción de que dichos cambios constitucionales cuentan con un amplio respaldo y no deberían enfrentar oposición, ya que buscan garantizar la estabilidad institucional y la transparencia en el sistema político dominicano.

Asimismo, el mandatario dominicano señaló su compromiso de buscar consenso y diálogo con los diversos sectores políticos y sociales del país para llevar a cabo estas reformas de manera inclusiva y participativa y resaltó la importancia de ejercer el poder legislativo de forma prudente y en armonía con los intereses de la nación, enfatizando que las reformas propuestas responden a la voluntad expresada por la ciudadanía dominicana.

Además, Abinader destacó la responsabilidad que conlleva la mayoría congresual obtenida por su partido, el Partido Revolucionario Moderno (PRM), considerándola como un compromiso para impulsar las transformaciones necesarias que impulsen el desarrollo social y económico del país.

Con una clara visión de progreso y bienestar para la República Dominicana, el presidente se comprometió a trabajar incansablemente para combatir la pobreza, mejorar la calidad de vida, fortalecer la salud, la seguridad ciudadana y la educación en beneficio de todos los dominicanos.

“Nadie que ame la democracia puede oponerse a esos cambios en la Constitución de este país”

Modificación de la Constitución: Un proceso riguroso

Modificar la Constitución de la República Dominicana es un proceso que requiere seguir ciertos pasos establecidos. La Constitución de la República Dominicana puede ser modificada de dos maneras, según el artículo 269:

Proposición de reforma.

Si la tercera parte de los miembros de una u otra cámara del Congreso Nacional presentan una propuesta de reforma, o si el Poder Ejecutivo la somete.

Decreto del Congreso Nacional.
En sesiones ordinarias, el Congreso Nacional puede decretar una reforma con dos tercios de los votos de la totalidad de sus miembros. El decreto debe señalar los artículos que se reformarán y será ratificado por la siguiente legislatura ordinaria con el mismo número de votos para que entre en vigor.

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La Constitución dominicana: Un recorrido de la historia moderna

La primera Constitución de la República Dominicana fue promulgada el 6 de noviembre de 1844, tan solo unos meses después de que el país lograra su independencia de Haití el 27 de febrero de ese mismo año. Esta primera Constitución fue redactada en la ciudad de San Cristóbal y estableció las bases del sistema político y jurídico del nuevo Estado dominicano.

Sin embargo, desde esa fecha hasta la actualidad,  ha experimentado un número signifcativo de modificaciones a lo largo de su historia republicana, con un total de 39 enmiendas realizadas hasta la fecha.

Estas reformas constitucionales han sido llevadas a cabo por un total de 14 gobiernos, lo que coloca a la Carta Magna dominicana entre las constituciones con mayor cantidad de cambios en Latinoamérica.

Reformas más recientes

La más reciente reforma es la del 13 de junio de 2015, impulsada para propiciar la reelección consecutiva del presidente Danilo Medina, ya que de lo contrario tendría que esperar cuatro años para volver a optar por la Presidencia de la República.

Anteriormente, la reforma del 26 de enero del 2010, presentada por Leonel Fernández, eliminó el “nunca jamás para optar por la Presidencia”.

Los cambios establecidos a la Constitución el 25 de junio de 2002, bajo el gobierno de Hipólito Mejía, restauraron la reelección presidencial y eliminaron los colegios electorales cerrados.

El 14 de agosto del 1994, durante el mandato de Joaquín Balaguer, se modificó la Constitución tras una crisis electoral; se dispuso nuevamente la “no reelección presidencial”, así como la reducción de cuatro a sólo dos años el período presidencial de Balaguer (94-98), lo que originó nuevas elecciones en 1996.

Además, se separaron las elecciones presidenciales de las congresuales y municipales y se creó el sistema de doble vuelta electoral en caso de que ningún candidato alcance el 50 % más un voto. Asimismo, se establecen los colegios cerrados, inamovilidad de los jueces y el principio de la doble nacionalidad.

La era de Trujillo: Reformas y dictadura

En 1966, Balaguer impulsó otra reforma profunda, desmontando las profundas enmiendas realizadas por el profesor Juan Bosch en 1963.

El 3 de septiembre de 1965 se levantó un acta institucional de la nación, para poner fin a la guerra de abril y dar paso al gobierno provisional de Héctor García Godoy.

El profesor Juan Bosch, en su gobierno de 1963, realizó una profunda reforma, renovando casi en su totalidad la Constitución.

De 1934 a 1960 la Constitución fue reformada siete veces por el dictador Rafael Trujillo Molina.

Horacio Vásquez estuvo al frente de las cuatro reformas realizadas de 1924 a 1929.

En tanto, el presidente Ramón Cáceres realizó la modificación constitucional de inicios de siglo pasado, en el año 1907

En el siglo XX, el dictador Ulises Heureaux llevó a cabo tres reformas constitucionales, en 1881, 1887 y 1896. Estos cambios buscaban fortalecer la autoridad del presidente y garantizar la estabilidad política del país.

Además, en 1879, un Consejo de Estado realizó algunas enmiendas a la Constitución, mientras que en 1880, el arzobispo Fernando Arturo Meriño, al frente del Gobierno, hizo algunos cambios adicionales.

En 1875, Ignacio María González realizó algunas reformas constitucionales en su calidad de presidente de la República. Estos cambios buscaban mejorar la estructura política y administrativa del país.

Cada cambio en la Constitución ha sido un reflejo de los cambios en la sociedad dominicana, y cada reforma ha dejado su huella en la forma en que se gobierna el país. 

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