Los gigantes del sistema financiero estadounidense sacan músculo. Cerrada la crisis desatada en abril con la caída de Silicon Valley Bank, los grandes bancos de Estados Unidos avanzan con paso firme impulsados por un contexto de altas tasas de política monetaria, que ha aumentado sus ingresos por intereses. Así lo demuestran los resultados del tercer trimestre presentados por algunos de sus máximos exponentes, que superan lo esperado por Wall Street.
El tercer trimestre fue sinónimo de crecimiento para JP Morgan Chase. Estas son las cifras clave:
Una de las claves que explica este resultado son los ingresos netos por intereses, que superaron las expectativas de forma amplia. Alcanzaron los US$22.9 mil millones (según CNBC, son US$600 millones más de lo esperado). Supone un avance interanual del 30 %.
Las acciones de JP Morgan Chase subieron un 4.7 % después de la publicación de los resultados.
Los ingresos netos por intereses también impulsaron los resultados de Bank of America. Estos son sus números clave:
El segundo mayor banco de EE.UU. generó US$14.4 mil millones, US$300 millones más de lo esperado, en ingresos netos por intereses. La política de altas tasas se ve reflejada en este factor. «Hemos añadido clientes en todas las líneas de negocio, y lo hemos hecho en un escenario económico sano pero lento», señaló el CEO de Bank of America, Brian Moynihan.
El ejecutivo apunta que el consumo en la mayor economía mundial está «por encima del año pasado, pero sigue lento».
Wells Fargo se suma a la lista de bancos impulsados por los ingresos netos por intereses. Aquí están sus datos más destacados:
El CEO de Wells Fargo, Charlie Scharf, señala que los resultados se explican por «el alto beneficio por intereses» (+8 % interanual) y también por «las inversiones que estamos realizando».
Pese a que sus beneficios cayeron respecto al mismo período del año anterior, los resultados de Goldman Sachs también estuvieron por encima de las previsiones expertas. Estas son las cifras:
La entidad está inmersa en un cambio radical de estrategia, que incluye su salida del negocio minorista para enfocarse de lleno en otros sectores. Así, mietras los ingresos por compraventa de bonos cayeron un 6 % interanual (menos de lo esperado), Goldman Sachs se mostró fuerte en compraventa de acciones (+8 %) y en banca de inversión (+1 %).
«Continuamos progresando de forma significativa en ejecutar nuestras prioridades estratégicas», señaló el CEO de Goldman Sachs, David Solomon.
Borja Santamaría, con información de CNBC
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