Según un proverbio hindú que «la más larga caminata comienza con un paso». De igual forma, la trayectoria a la cima en el mundo de los negocios comienza con una primera experiencia en forma de empleo, proyecto personal o golpe de inspiración. En algunos casos, ese primer paso es definitivo, mientras que en otros resulta una simple anécdota. Así nos lo muestra la historia personal de los grandes CEOs del mundo ‘business’. Mientras que Musk, Buffett o Nooyi tuvieron trabajos que no guardan ninguna relación con sus compañías, en el caso de Zuckerberg o Barra, sus inicios están estrechamente ligados a su triunfo. Estos fue el primer empleo de algunos de los empresarios y empresarias más exitosos del planeta.
A los 16 años, Jeff Bezos tenía un gran enemigo: el dispensador de ketchup del McDonald’s en el que trabajaba. «Salía a chorros y se pegaba en rincones muy difíciles de limpiar», reconoce. Un empleo que, sin embargo, le proporcionó sus primeros sueldos con los que, entre otros proyectos, creó un campamento para niños enfocado en ciencias y tecnología.
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My first job. And still the same great burger. Happy Sunday! pic.twitter.com/3slx6dHUVa
— Jeff Bezos (@JeffBezos) August 28, 2022
Seis años después de aquellos molestos chorros de ketchup, Bezos se graduó en la Universidad de Princeton (Ciencias de la Computación e Ingeniería Eléctrica). Tras varios trabajos, a los 31 años (1995) fundó la librería en línea Cadabra.com, con una inversión de US$1.3 millones. Fue el inicio de su despegue.
Mary Barra es un claro ejemplo de profesional que crece y se desarrolla en una misma compañía. La actual presidenta y directora ejecutiva de General Motors conoce como nadie las entrañas de su empresa. No en vano, su primer empleo consistió en supervisor partes capós de los coches que se fabricaban en el gigante automovilístico, concretamente en el General Motors Insititute.
Los salarios le sirvieron para pagar sus estudios. Se graduó en Ingeniería Eléctrica y después, ya en la Universidad de Stanford, en Administración de Negocios. Su desempeñó le hizo evolucionar en la empresa. Directora de comunicaciones, jefa de planta, responsable de ingeniería y desarrollo de productos… Hasta que, en enero de 2014, se convirtió en la primera mujer en dirigir una gran compañía automovilística.
Seguro que imaginan sin problemas esta escena, muy habitual en el cine. Un adolescente pedalea por un barrio tranquilo mientras lanza el periódico a la puerta de las casas. Pues bien, allá por 1944, ese joven era Warren Buffett, el que décadas más tarde se convertiría en accionista de, por ejemplo, el Washington Post.
Ya a sus 14 años, cuando lanzaba periódicos por su barrio en Omaha (Nebraska), Buffett dejaba entrever su privilegiada visión para los negocios. Ahorró lo suficiente para, por ejemplo, comenzar a vender sellos y pelotas de golf. Negocios a pequeña escala con los que empezó a amasar un capital que, con los años y las inversiones, convertiría en una de las mayores fortunas del planeta.
Curiosamente, el de repartidor de periódicos también fue el primer empleo de otro destacado CEO: Tim Cook (Apple).
Medio dólar la hora en turno de noche. Fue el modesto primer salario de la que más tarde se convertiría en CEO de PepsiCo. Admitida en la Universidad de Yale con una beca, Indra Nooyi tuvo que combinar sus estudios con su empleo en la recepción de la residencia donde vivía. No fue hasta los 39 años cuando entró en la empresa en la que ha conseguido alcanzar el olimpo. Hoy, su patrimonio neto está calculado en más de US$140 millones.
Desde una granja, al espacio. La carrera profesional de Elon Musk está marcada por proyectos futuristas, rompedores, estrechamente relacionados con la innovación. Quién sabe si ese espíritu vanguardista ya lo caracterizaba cuando, siendo un adolescente, comenzó a trabajar en una granja familiar.
On my cousin's farm in Canada at 17, wearing a hat on a hat pic.twitter.com/U96ClGz5gZ
— Elon Musk (@elonmusk) May 13, 2017
Nacido en Pretoria, Sudáfrica, emigró junto a su familia a Canadá. A los 17 años, empezó a trabajar en una granja en la localidad de Saskatchewan, de apenas 400 habitantes. Poco después, pasó a limpiar la sala de calderas en una serrería. Embozado en un traje especial para materiales peligrosos, ganaba US$18 cada hora. Según relata el propio Musk, 30 personas se juntaron un lunes para comenzar el trabajo. Lo acabaron tres. El resto, renunció.
En 1997, a los 26 años, Musk se graduó en Economía y Física (Universidad de Pensilvania). Fue rechazado en la empresa Netscape y al poco tiempo completó su primer gran negocio. Vendió su primer proyecto, Zip2 (software de guías locales), a Compaq por US$300 millones.
En 2020, Carol B. Tomé hizo historia en UPS. En sus 113 años, nadie había tomado el cargo de CEO sin haber trabajado antes en la empresa. Asumió las riendas de la multinacional, algo que, seguramente, no entraba en sus planes más optimistas cuando, en 1981, comenzó a trabajar en el departamento de créditos del United Bank of Denver. Evolucionó en el mundo financiero hasta que en 1995 (38 años) se unió a The Home Depot, liderando su proceso de expansión a México. Fue el paso que marcó definitivamente su trayectoria.
El camino profesional de Bill Gates siempre ha transitado por el mismo campo. A los 16 años consiguió su primer empleo en la empresa TRW. Su puesto era el de programador. Por aquel entonces ya destacaba por sus conocimientos tecnológicos, y ya conocía a su futuro socio, Paul Allen. Ambos coincidieron en la escuela de Lakeside, en Seattle. Una amistad que les cambiaría la vida.
Cara a cara de CEOs: ¿Steve Jobs y Bill Gates, en el mismo escenario? Sucedió hace 15 años
El 4 de abril de 1975 Gates era todavía un estudiante de Harvard cuando, junto a Allen, fundó Microsoft. El resto es historia.
Judith McKenna dirige los destinos de uno de los gigantes del retail mundial, Walmart. Sin embargo, sus inicios guardan relación con los de Carol B. Tomé. Ambas dieron sus primeros pasos en el terreno de las finanzas.
En el caso de McKenna, comenzó como contable en KPMG. A los 30 años dio un paso clave en su trayectoria, uniéndose a la cadena de supermercados británica Asda. En ella, ascendió a directora financiera y, más tarde, a directora ejecutiva, y conoció a David Cheesewright, que posteriormente sería su predecesor en Walmart.
El equipo de captación de la empresa de videojuegos Atari tuvo, en 1974, un acierto pleno. Contrató a Steve Jobs, que regresaba a San Francisco tras dos años en la Reed College de Oregon (18 meses como oyente). El futuro fundador de Apple demostró, en dos breves estancias en la compañía, todo el talento y la visión empresarial que guardaba. Trabajó en el turno de noche y desarrolló el prototipo de Breakout, uno de los grandes éxitos de la productora.
En 1975, Jobs dejó Atari para cumplir uno de sus proyectos vitales: viajar a India. Una experiencia que le marcó para el resto de su vida profesional y personal.
Atari brought other arcade hits to its home console, such as Breakout.
You might recall it was designed by a guy name Steve Wozniak.
His friend Steve Jobs was an engineer at Atari and asked Woz to create it:pic.twitter.com/TWdlKrr5yA
— Jon Erlichman (@JonErlichman) October 14, 2022
Mark Zuckerberg era un estudiante de Harvard cuando cambió el mundo de la comunicación. El neoyorkino creó Facemash, un directorio interno entre universitarios donde su puntuaban fotos. No exento de polémica (la universidad le reprochó el violar la privacidad, una acusación bastante recurrente en su trayectoria), fue el embrión de lo que terminó siendo Facebook. El primer paso profesional de Zuckerberg coincidió, por tanto, con el nacimiento de la compañía que lo llevó a la cima.
Por Borja Santamaría
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