In memoriam de 366 días que sacudieron al mundo - Revista Mercado
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In memoriam de 366 días que sacudieron al mundo

Por Karime Rivas | enero 1, 2021

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Es imposible despedir el 2020 sin antes hacer un recuento de los hechos. Hubo tantas cosas que marcaron la historia de nosotros como humanidad, que aún hoy, cerrando el año, podemos decir que son muchas las naciones que se encuentran en una fase de ensayo y error para sobrellevar la crisis mundial con el menor costo.

Sin embargo, grandes muestras de bondad y esperanza, se hicieron presentes en medio del caos y la incertidumbre. Vimos personas de todas las razas, cultura y credo, darse la mano en medio de la peor crisis que ha atravesado el hombre moderno.

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Llegó enero y las imágenes de un monstruo de fuego alzándose en Australia, consumiendo más de 26.4 millones de acres (un área más grande que el Estado de Virginia), con una pérdida aproximada de 1.250 especies de animales y decenas de vidas humanas, movieron al mundo entero, reuniendo a los mejores profesionales de todas las naciones para atender la emergencia.

En un mes que parecía no terminar, por un momento contuvimos la respiración, cuando los expertos aseguraban que podríamos estar a las puertas de una Tercera Guerra Mundial, luego de la decisión de Donald Trump de darle muerte al líder iraní Qasem Soleimani. Por suerte, las amenazas del estado de Irán cesaron, mientras se abría paso desde Asia la verdadera amenaza mundial.

El 23 de enero, se hace oficial la noticia: China tenía un brote de un «síndrome respiratorio agudo grave». Un virus de la familia SARS, se alzó desde el oriente como una pestilencia que progresivamente se fue propagando hasta alcanzar la categoría de pandemia. Convirtiendo al 2020 en un año raro, lleno de incertidumbre y que hizo de un abrazo un arma letal.

Mientras tanto, no cesaban las noticias de impacto, pues en el mismo enero se sintió la muerte de Kobe Bryant, un deportista que dejó profundas huellas por su calidad humana y trayectoria. Y entre llanto y despedidas, poco a poco el planeta se cubría con un tapabocas. Aprendimos a sonreír con los ojos, abrazar con una reverencia y a convertir en un accesorio de vestimenta a este artefacto que nos protege de contraer el virus.

Llega marzo y se paraliza el mundo, España decreta su estado de emergencia y República Dominicana entra en confinamiento radical. Tuvimos que reunir todas las fuerzas posibles, para encontrar esa adaptabilidad propia del ser humano y vivir «la nueva realidad».

Aprendimos a brindar apoyo desde la distancia y poco a poco los medios de comunicación, se llenaron con titulares al estilo «cuando el mundo se para el planeta respira», y fuimos testigos de imágenes sublimes de la naturaleza recobrando su espacio, mientras el mundo y la RAE dimensionaba el significado de la palabra confinamiento.

A propósito de un respiro, en algún suburbio de Estados Unidos el afroamericano George Floyd, exhaló su último aliento gracias a una bota de un oficial de la policía que decidió cortarle el aire de sus pulmones por ser negro. Esta muerte desencadenó una significativa ola de protestas en el gigante del Norte, hizo que el país pusiera su mirada en la pequeña Candem City.

Un aliento contenido también en agosto, cuando en redes sociales comenzó a extenderse múltiples videos que mostraron al mundo el instante en que ocurrió la explosión de una carga de nitrato de amonio, que se encontraba en el puerto de Beirut . «Primero tembló el piso», contó una habitante del lugar, «una vibración leve parecido a una sacudida, uno, dos, tres y llegó el gran sacudón», que se llevó la mitad de su edificio, dejando con vida algunos cuantos de sus habitantes.

Alcanzamos noviembre y con ello una cifra alarmante de un millón de muertos según el recuento de la universidad estadounidense John Hopkins. Más de 32 millones de personas han sufrido covid-19 desde que empezó la crisis sanitaria.

Mientras tanto, Estados Unidos vuelve a tomar protagonismo con un evento político: Biden & Harris ganan las elecciones y serán el presidente y la primera mujer vicepresidenta de Estados Unidos. Trump se niega a aceptar el resultado: “Esto es un fraude”. Generando una inestabilidad en la región que nunca antes se había visto.

Sin embargo, tal parece que podemos decir que se cerró el año con mucho éxito y la mejor noticia: alcanzamos a ver la primera vacuna que fue elaborada en tiempo récord. La ciencia le regaló una esperanza al mundo de tener un mejor Año Nuevo.

El Reino Unido pone la primera vacuna en Europa contra el covid-19. La vacunada, Margaret Keenan, dice: “Si yo me la puedo poner a los 90 años, cualquiera puede”.

Y con esta idea de «cualquiera puede», cerramos el año, destapamos la botella y brindamos en familia por un mejor mañana y por el desarrollo de un país que nos cobija. Gracias por todo 2020.