Panel de empresas familiares en el sector automotriz dominicano: El reciente evento «Family Values 2024» incluyó un panel especial sobre el legado del sector automotriz en República Dominicana. Reunió a destacados sucesores de reconocidas familias empresariales, quienes compartieron sus experiencias y los valores que han guiado la continuidad de sus negocios a lo largo de generaciones. La moderadora del panel, Patricia Janiot, resaltó la importancia de reconocer el impacto de estas empresas familiares en la economía y el desarrollo social del país.
Durante el panel, se destacó que las organizaciones familiares no solo se enfocan en la supervivencia económica, sino que se esfuerzan por transmitir un legado que abarca valores, propósito y responsabilidad social. Se debatió sobre cómo estas firmas han demostrado una notable resiliencia y adaptabilidad frente a los desafíos del mercado global, generando oportunidades y actuando como agentes de cambio social.
Las intervenciones de los panelistas, que representaban a empresas icónicas del sector, ofrecieron un fascinante recorrido por la historia de la industria automotriz en el país. Desde la llegada del primer vehículo a la isla en 1906, familias como la Barletta, Abreu, Peinado y otras, han forjado caminos de éxito y excelencia empresarial. Se subrayó cómo valores como la honestidad, la lealtad y el compromiso hacia la calidad han sido fundamentales en la cultura empresarial transmitida de generación en generación.
Cada uno de los sucesores compartió su propia historia familiar, mencionando a sus antepasados y los aprendizajes obtenidos. Milagros Abreu, de Avelino Abreu, relató su trayectoria desde niña en el negocio familiar, destacando la influencia de sus padres y su deseo de mantener vivo el legado. Jacinto Peinado, de Auto Europa, enfatizó la importancia de la lealtad y el arduo trabajo que su familia ha practicado a lo largo de los años, mientras que Clara Reid, de Reid y Compañía, subrayó el valor del servicio al cliente como pilar de su filosofía empresarial.
El panel también reflexionó sobre la relevancia de mantener una comunicación abierta y un espacio donde los nuevos líderes puedan innovar y prosperar sin perder de vista los principios familiares. Los panelistas coincidieron en que no todos los miembros de la familia necesariamente deben incorporarse al negocio, pero aquellos que elijan hacerlo deben estar apasionados y comprometidos.
Al concluir la sesión, Patricia Janiot invitó a los participantes a reconocer la importancia de fomentar un ambiente donde los valores familiares y el trabajo duro sean la norma, asegurando así la continuidad del legado empresarial a través de las generaciones venideras. La conversación fue un recordatorio poderoso de que el éxito en los negocios familiares no es solo una cuestión de números, sino de construir una herencia duradera basada en principios sólidos y conexiones interpersonales profundas.
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