En los últimos cinco años las empresas han depositado su atención en los proyectos sostenibles, que sostengan buenas políticas de gobernanza, iniciativas ambientales y de bienestar social. La moda no escapa a estos principios y ReSuit trae una propuesta para la ropa que ya no usas.
El fast fashion es una tendencia en el mundo de los textiles, gracias a la posibilidad de replicar en masa aquellos modelos de pasarela a un menor costo. Sin embargo, esta práctica trae consigo que el 10 % total de las emisiones del carbono del mundo, sean producidos por esta industria. Además, es la que más consume los suministros de agua y contamina los océanos con microplásticos.
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ReSuit y todas las empresas que se abrieron al mercado de segunda mano, ayudan a reducir las emisiones de carbono en 500 libras por persona al año. Estos significa una disminución de residuos y uso de agua en un 80 %.
Al respecto, Nada Shepherd, cofundadora de ReSuit comentó en una entrevista la importancia de tener un cambio de paradigma, donde se comprenda que este método no elimina los residuos solo los reduce en el tiempo.
Mientras tanto, estadísticas brindadas por Statista, apuntan a que la tendencia de pagar por experiencias en lugar de coleccionar cosas, que ha sido impuesta por los Millennials, ha continuado con la Generación Z. Por esto es tan necesario un concepto que le de uso a la ropa que ya no usas.
Considerando un modelo de economía colaborativa, donde las nuevas tecnologías nos ayuden a prestar, comprar, vender, compartir o alquilar bienes y servicios; se espera que el sector aumente a 600,000 millones de dólares para 2027, desde los 113,000 millones de dólares de 2021.
Shepherd como mujer de negocios intentó comenzar como minorista, pero la fuerte recesión durante la pandemia llevó su negocio al fracaso. En su segundo intento se enfrentó a otro problema, la falta de inventario.
Y fue justo aquí cuando surgió su idea novedosa, ¿para qué esperar inventario para iniciar un negocio? Ella diseñó un negocio donde solo existen los consumidores y el mercado. Quiso desarrollar un sitio para que las personas pudiesen alquilar su ropa y para que diseñadores emergentes o más pequeños puedan crear nuevas líneas, sin manejar grandes inventarios.
Su idea demostró en gran medida que salir del propio camino que has trazado, también puede salir bien.
Por: Karime Rivas.
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