¿Cuánto le cuesta a las empresas que un empleado no tome vacaciones?

Si eres de los que piensan que las vacaciones no son importantes y además son una pérdida de tiempo y dinero para la empresa, este artículo es para ti.

Todos y cada uno de nosotros necesitamos descansar. No importa que seas el Jefe o el empleado. Después de un periodo de tiempo en el que has estado trabajando, tu cuerpo y tu mente piden desconectarse durante unos días para recargarse y volver renovado a tus funciones laborales.

Los beneficios de las vacaciones parecen evidentes para todos. Pero, ¿te has planteado cuánto cuesta a las empresas que un colaborador no tome vacaciones? Quizás creas que no disfrutándolas estás ayudando a la empresa y sin embargo, es muy posible que el efecto sea el contrario.

EFECTOS NEGATIVOS PARA LA EMPRESA

Veamos en detalle las posibles consecuencias de no tomarte esos días que te corresponden:

• Productividad: largas jornadas laborales cansan a los trabajadores. El cuerpo deja de ser productivo y el estrés se acumula. Es por esa razón que las vacaciones son necesarias y están reguladas por las leyes laborales.

Datos de la Organización Mundial de la Salud demuestran que el estrés laboral puede provocar “pérdidas de entre el 4 y el 6% de PIB nacional de un país, donde el estrés causa enfermedades que a la larga, traen ausentismo y retrasos en producción o ventas”.

• Absentismo y desorganización: El absentismo laboral aumenta cuando no se toman vacaciones. Esto supone un perjuicio no solo para el empleado, que sufre la situación de burnout, sino también para el resto de los colaboradores que deberán asumir sus funciones. La carga de trabajo aumenta para los demás y al encontrarse ante una situación inesperada, sufrirán de estrés.

• Desmotivación: El simple hecho de pensar en las vacaciones produce un sentimiento de alegría en el individuo. Sacrificar las vacaciones porque tenemos demasiado trabajo o porque nos creemos indispensables, no es la situación ideal, ni para nosotros ni para nuestra organización. Nos sentiremos cansados y desmotivados. Perderemos concentración y a la larga nuestro trabajo se verá afectado.

SOLUCIÓN BENEFICIOSA PARA TODOS

Organiza tu tiempo adecuadamente y planifica con tu organización cuándo vas a tomar vacaciones. Una planificación adecuada te permitirá ordenar la carga de trabajo que se generará durante el periodo que no estés en la oficina.

Habla con tus superiores y tu equipo para que juntos, podáis ver quien se ocupará de cubrir aquellas funciones que deben seguir realizándose durante el tiempo que estés ausente. Saber delegar es un arte, y este es un buen momento para ponerlo en práctica.

Así que ya sabes. Disfruta de las vacaciones. ¡Tu cuerpo y tu empresa te lo agradecerán!

Por Isabel Ariza