Pasamos de las compras presenciales a la solicitud de productos online, la espera del delivery y aplicaciones que nos permiten recorrer la tienda desde el móvil. Ahora, estamos viendo el siguiente paso en la evolución de las compras: el Live Shopping. Una modalidad que está dominando en las redes sociales y aplicaciones de compra en línea como Shein, que le ha dado un giro a la experiencia de compra.
El comercio electrónico, junto con la transmisión de video en vivo, ha creado una experiencia interactiva que muestra contenido que se puede comprar y permite a los comerciantes dar vida a la experiencia de la tienda, simplemente en línea. En lugar de que los clientes potenciales tengan que leer las descripciones de los productos y buscar en Internet las opiniones de los clientes, ahora pueden unirse a una transmisión de video en vivo y tener conversaciones en tiempo real sobre los productos antes de comprar directamente desde la transmisión.
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En el año 2019 las compras en vivo generaron 60 mil millones de dólares en ventas globales, según Coresight, y Estados Unidos solo representó menos de 1 mil millones de eso.
Con más y más compradoras recurriendo a sus teléfonos celulares para todo, desde comprar, pagar facturas, tomar fotos, hasta sus operaciones bancarias, no es de extrañar que las compras en vivo sean una tendencia a tener en cuenta. Esta tendencia se adapta muy bien a los nuevos comportamientos de compra; más de la mitad de compras realizadas por internet se realizan desde un dispositivo móvil.
Se esperaba que este contenido exclusivo del comercio minorista móvil a través de teléfonos inteligentes generara ventas de 221,2 mil millones de dólares en los Estados Unidos en 2021, y se proyectaba que superarían los 400 mil millones de dólares para 2024.
Este contenido exclusivo brinda a los clientes una experiencia personal interactiva y atractiva con marcas, personas influyentes y expertos. Y el hecho de que esté en vivo crea una sensibilidad temporal para instar a los clientes a actuar con rapidez.
La compra en vivo, hasta el momento, es lo más cercano que hemos podido llegar a replicar en los entornos virtuales la experiencia de compra de la tienda. Le proporciona herramientas a las consumidoras para hacer preguntas e interactuar con los vendedores. El 90% de las consumidoras dicen que la autenticidad es importante para decidir qué marcas apoyan.
Esta modalidad permite a las marcas exhibir sus productos de maneras únicas, como un desfile de modas, un argumento de venta similar a QVC o una experiencia de adaptación personal del centro comercial.
A diferencia de los anuncios de video, las comprasen vivo crean un entorno en el que los compradores se unen por elección y no se les impone ningún anuncio, sin cookies ni seguimiento, simplemente clientes potenciales que ingresan virtualmente a su evento de Live Shopping porque su interés ha despertado. Muy similar a la experiencia de un centro comercial en persona.
El Live Shopping permite a las marcas contar historias con sus productos y, como ya sabemos, la narración verde, lo que genera conciencia, participación y ventas. Esta última tendencia en el comercio electrónico combina las redes sociales, la popularidad del video y los avances tecnológicos para brindar una solución muy oportuna a los consumidores que se han quedado en sus hogares.
Ya sea que las personas se unan a los eventos de compra por entretenimiento, simplemente para pasar el tiempo o para disfrutar de una experiencia de compra más interactiva, el clima actual ha acelerado el atractivo de las comprar en vivo tanto para las compradoras en línea como para las tradicionales. (KR)
