La toma de posesión de Jenniffer González Colón como gobernadora de Puerto Rico marca el inicio de una era política con promesas ambiciosas y un enfoque renovado en las relaciones internacionales, especialmente con la República Dominicana. En su discurso inaugural, la líder del Partido Nuevo Progresista (PNP) reafirmó su compromiso de estrechar los lazos económicos y culturales entre ambas naciones, destacando la presencia del presidente dominicano Luis Abinader y el canciller Roberto Álvarez en el acto.
“Puerto Rico y la República Dominicana seguirán cosechando lazos económicos y de amistad, como siempre los ha habido”, declaró González, enfatizando la importancia de fortalecer una relación histórica cimentada en migración, comercio y cooperación regional.
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La migración dominicana ha sido un pilar en las relaciones entre ambas islas. En 2023, residían en Puerto Rico más de 54,000 dominicanos, según el Instituto de Dominicanos y Dominicanas en el Exterior (Index). Este grupo, que ha encontrado oportunidades en sectores como la construcción y los servicios, también representa una influencia clave en el panorama político. De hecho, González obtuvo un contundente 70% del voto dominicano en San Juan, evidenciando su popularidad entre esta comunidad.
Durante su gestión como representante de Puerto Rico en el Congreso de Estados Unidos, González fue una firme defensora de incluir a la República Dominicana en el programa de visas H-2B para trabajadores no agrícolas, una medida que podría revitalizar la economía regional al facilitar el flujo de mano de obra cualificada.
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El comercio entre Puerto Rico y la República Dominicana asciende a miles de millones de dólares anuales, con sectores como la manufactura, los alimentos y la tecnología liderando las exportaciones. González anunció que su administración priorizará la expansión de estos intercambios, así como la inversión en infraestructuras clave para facilitar el transporte de bienes entre ambos territorios.
“La conectividad será un factor estratégico. Puerto Rico servirá como un puente para las empresas dominicanas que busquen acceder al mercado estadounidense”, afirmó González.
Sin embargo, la gobernadora enfrenta un panorama complejo en casa, con un sistema eléctrico precario que ha provocado apagones masivos. Incluyendo uno que dejó a 1.3 millones de personas sin luz en las últimas semanas de 2024. Este problema, combinado con una deuda pública que supera los 70,000 millones de dólares, ha ralentizado la recuperación económica de la isla.
No obstante, González se muestra optimista. Su plan incluye atraer inversión extranjera y maximizar los fondos federales disponibles para modernizar la infraestructura energética, vital tanto para el desarrollo local como para fortalecer los lazos comerciales con la República Dominicana.
En su discurso inaugural, González reafirmó su compromiso con la ‘estadidad’, el movimiento que busca la anexión de Puerto Rico como el estado número 51 de los Estados Unidos. La estadidad podría redefinir las relaciones con países vecinos, incluyendo la República Dominicana, al abrir nuevas oportunidades para acuerdos bilaterales bajo un marco federal estadounidense.
Sin embargo, este camino está lleno de obstáculos. La medida requiere la aprobación del Congreso y del presidente estadounidense, y enfrenta resistencia tanto en la isla como en Washington.
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La gobernadora también está enfocada en enfrentar la crisis demográfica de Puerto Rico. En los últimos 15 años, la población ha disminuido un 18% debido a bajas tasas de natalidad y migración. Jenniffer González busca revertir esta tendencia incentivando la inversión en sectores clave y creando oportunidades que retengan a los jóvenes talentos.
“Fortalecer las relaciones con la República Dominicana es parte de una estrategia integral para revitalizar nuestra economía y posicionar a Puerto Rico como un líder en la región del Caribe”, concluyó González.
Con esta visión ambiciosa, Jenniffer González Colón enfrenta un desafió monumental. Su éxito no solo definirá el futuro de Puerto Rico, sino también el fortalecimiento de un puente histórico con la República Dominicana. Uno que promete prosperidad para ambos territorios.
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