Cuando navegas sin remos: ¿cómo afrontar el futuro en la gestión de negocios?

Por Karime Rivas | febrero 8, 2023

Ante un ambiente mundial plagado de incertidumbre se hace cada vez más difícil gestionar las emociones. Esto es particularmente grave, si tenemos en consideración que es de allí que emanan las decisiones de una líder de negocios, por lo que cabría preguntar, ¿cómo sobreponerse a la crisis y la incertidumbre que genera?

Últimamente todos hablan de «navegar el caos» a partir de una psicología positiva, pero pocas tienen claro cómo lograr llevar esta idea a la acción. Por ello, te dejamos este mapa y brújula, para que la crisis no tome el control de tu barco… y si lo toma, pues hacer que te lleve a buen puerto.

Gestiona una vida bajo la urgencia

La crisis trae consigo una claridad que bajo ninguna otra condición se consigue, por lo que gestionar tus días en urgencia (pero lejos de la crisis y el estrés), es bueno para producir rutas eficientes para navegar todo tipo de circunstancias.

Fotografía: Catalyst

Algunos autores citan las crisis como un momento perfecto, en el que se tienen pocas opciones. Es un punto muerto en el que nos vemos obligadas a hacer que algo funcione. En tal sentido Matt Higgins empresario fundador de RSE Ventures y miembro de Shark Tank, dice «es mucho más difícil hacer grandes movimientos cuando las cosas van bien y no hay ímpetu inmediato para cambiar».

Son precisamente esos momentos en que no hay meas opción, donde la claridad se presenta y lejos de preguntarte por «¿Qué habría sido si…?», sentirás profundo agradecimiento por la salida que se presente.

Lo más interesante, es que de acuerdo a Matt Higgins, incluir esta manera de pensar en tu día a día hará que incluso en los buenos tiempos puedas tomar acción mucho más rápido. Entonces no necesitarías la crisis para comenzar desde cero, ni gestionar emergencias.

Corta toda relación con el miedo

Con frecuencia las líderes de negocios se ven atrapadas entre la ansiedad de lo que vendrá en el futuro, y las decisiones con malos resultados que se tomaron en el pasado. De este modo, el presente queda anulado por el miedo, la inmovilización y una línea de pensamiento que se convierte en profecías autocumplidas.

La terapia cognitiva – conductual ofrece un método para que los pensamientos (por lo general negativos) no entorpezcan la toma de decisiones y se generen errores. Algunos de los escenarios que hay que evitar son:

  1. El pronóstico negativo o adivinación. Esta postura desata la ansiedad y una actitud de crisis ante la calma, que se degenera en una mala toma de decisiones.
  2. La convicción de que el fracaso es el destino. Con esto la vida se convierte en blancos y negros, eliminando la zona gris donde normalmente se desarrolla la vida.

Para lograrlo, una práctica que recomienda Jennifer Guttman, psicóloga clínica y motivadora, es tomar una cinta elástica y amarrarla a tu muñeca. Cuando los pensamientos extremos acudan a tu cabeza, puedes tirar de la cinta para sentir y conectar de nuevo con tu cuerpo.

La atención plena en tu cuerpo y entorno, le dice a tu mente que está pasando algo afuera de lo que tu mente dice y es diferente. Otra técnica para lograrlo es identificando a tu alrededor 5 objetos, luego di sus nombres (ejemplo bolígrafo, vaso, libro…) mientras tomas una respiración profunda. Notarás cómo conectas con tu entorno.

Dale un stop a los pensamientos obsesivos

Si alguna vez has tenido pensamientos del tipo «debí haber hecho esto», «debí haber dicho lo otro», es porque has tenido lo que los psicólogos conocen como pensamiento contrafáctico. Algo a lo que las empresarias son particularmente sensibles, por su tendencia a pensar en lo que pudo haber sido.

Imagen: Stylecraze

Esta forma de pensamiento te lleva a creer que eres dueña absoluta de tu destino, y si hubieses hecho o dicho algo en específico, las cosas habrían sucedido diferente.

Los científicos aseguran que esta tendencia surge de la capacidad que tiene nuestro cerebro de aprender de las malas experiencias, lo malo sucede cuando el pensamiento queda atrapado en esta información como un bucle. Aunque el aprendizaje funciona de este modo, esto puede ser una trampa, ya que muchas veces lo que vemos como resultado negativo no necesariamente lo es.

Las personas suelen fijarse en el inicio y el final de los acontecimientos, juzgando los resultados con grandes vacíos de información. De hecho, no se toma en cuenta el desarrollo total de la historia, como un conjunto de acciones que decantaron a un resultado.

Para combatir esto, los expertos recomiendan acudir a un reenfoque. Los medallistas de bronce suelen verse más felices, que los que ganan plata. Esto se debe a que el que se lleva plata piensa en lo cerca que estuvo del oro, mientras que el que se lleva bronce piensa en que no perdió.

Utiliza tu fondo de emergencia emocional

Imagen: Amazon

CYndie Spiegel ilustra el vivir en estado de emergencia a la perfección en su libro Microjoys: Finding Hope. En él, responde a la gran interrogante, ¿cómo ser positiva cuando no hay motivos para serlo?

En sus páginas narra una profunda crisis que vivió, en la que para salir de ella comenzó a apreciar los instantes de alegría en medio del dolor. Descubrió que había un centenar de pequeñas cosas para disfrutar en el día a día.

La llave de la positividad te lleva a construir conexiones honestas y conversaciones de valor con las personas que te rodean. No se trata de ser feliz intrínsecamente, sino de relacionarte mejor. Una cualidad fundamental cuando encabezas un negocio.

Lo importante de adoptar una postura positiva es no golpearte por no conseguir ver lo bueno de la situación, porque a veces no lo hay. Pero, en su lugar,  sí puedes encontrar los «pequeños respiros» en el momento presente.

Por: Karime Rivas.