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El Servicio Nacional de Salud (SNS) ha logrado importantes avances en la modernización de hospitales en todo el país. Bajo el liderazgo de Mario Lama, se han remozado más de 55 hospitales y 600 Centros de Primer Nivel. Este proceso ha transformado la infraestructura hospitalaria, mejorando la calidad de la atención y reduciendo los tiempos de espera para los pacientes.
Uno de los hitos más destacados es la incorporación de equipos médicos modernos, como tomógrafos, mamógrafos y ecocardiogramas, que han fortalecido los servicios médicos especializados. Estas mejoras han permitido una mayor capacidad de diagnóstico y tratamiento, lo que resulta en un impacto positivo en la detección temprana de cáncer y el tratamiento de otras enfermedades.
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Además, el SNS ha optimizado la gestión de recursos mediante la implementación del Programa Desempeño SNS y el SISMAP Salud, dos herramientas que monitorean indicadores clave en áreas administrativas y clínicas. Esta estrategia ha permitido una asignación eficiente de los recursos disponibles, asegurando que cada hospital cuente con el equipo necesario para ofrecer una atención de salud de primer nivel.
La inversión en infraestructura hospitalaria ha sido clave para el éxito de la modernización del sistema de salud. En este proceso, se han construido hospitales especializados en diversas regiones del país, incluyendo cuatro hospitales traumatológicos y el primer hospital materno infantil en el sur del país. Estas obras no solo mejoran el acceso a la atención médica, sino que también alivian la carga sobre los centros más grandes y mejoran la capacidad de respuesta ante emergencias.
El tele diagnóstico es otro avance importante impulsado por el SNS. Esta tecnología facilita el acceso a especialistas en zonas rurales, reduciendo la necesidad de traslados y asegurando que los pacientes reciban atención oportuna sin importar su ubicación. La tecnología en servicios de salud ha sido un pilar esencial para lograr una atención más eficiente y equitativa.
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La transparencia en la administración pública ha sido uno de los valores innegociables en la gestión del Sistema Nacional de Salud (SNS). Bajo esta premisa, se ha implementado una política de rendición de cuentas que permite supervisar el uso de los fondos públicos de manera constante.
Esta práctica no solo garantiza una gestión más eficiente, sino que también fomenta la confianza de la población en el sistema de salud.
Además, el desarrollo del talento humano ha sido una prioridad en la gestión de Mario Lama. A través de programas de capacitación continua y formación especializada, el SNS ha mejorado significativamente la profesionalización del personal médico. Esto no solo garantiza una atención más integral, sino que también asegura una respuesta más efectiva a las necesidades de la población, promoviendo así un sistema de salud más robusto y accesible para todos.
El Servicio Nacional de Salud (SNS) en República Dominicana ha invertido más de RD$ 2,657 millones en equipamiento hospitalario, incluyendo la entrega de tomógrafos, mamógrafos y equipos para unidades neonatales. Estas inversiones han permitido modernizar más de 240 hospitales y centros diagnósticos en todo el país, mejorando significativamente la atención de salud.
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Gracias a la modernización de hospitales y la mejora de la infraestructura, el Sistema Nacional de Salud (SNS) ha logrado avances significativos en la atención de la población.
Se han habilitado 14 unidades de diagnóstico de patologías cardíacas en recién nacidos, y más de 156 unidades de servicios han sido modernizadas en todo el país. Además, se ha impulsado un programa de detección temprana de cáncer de mama, cervicouterino y próstata, brindando acceso a exámenes especializados a los sectores más vulnerables.
La modernización también ha permitido avanzar en la detección y tratamiento de problemas como el déficit auditivo, asegurando así una atención integral para los pacientes desde el primer nivel de atención, lo que contribuye a un sistema de salud más accesible y eficiente.
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A pesar de los importantes avances logrados, el Sistema Nacional de Salud (SNS) reconoce que aún quedan desafíos por enfrentar. Una de las prioridades futuras es continuar mejorando la infraestructura y seguir fortaleciendo la atención primaria.
Esto permitirá aliviar la presión sobre los hospitales, mejorar la optimización de recursos y garantizar un acceso más amplio a la atención médica en las comunidades más alejadas y vulnerables. Además, el desarrollo de talento humano seguirá siendo un pilar fundamental para asegurar la calidad de los servicios y enfrentar los desafíos del futuro, garantizando así una atención más equitativa y efectiva para todos.
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