Proponen estimulación eléctrica del nervio vago como buena opción para aliviar la inflamación crónica

Por | julio 14, 2023

¿Sabía usted que el nervio vago es una de las partes más primitivas del sistema nervioso humano, el cual controla muchos aspectos del cuerpo que están fuera de nuestro control consciente? Así es, además interviene en distintos procesos, desde comer hasta respirar, incluso se asegura de que el corazón nunca pierda un latido, y se extiende a todos los órganos principales.

Por ello, comprender cómo funciona puede ofrecer nuevos conocimientos sobre el tratamiento de enfermedades crónicas, y eso lo sabe perfectamente la ciencia médica. Tanto así que se ha propuesto estimular este nervio mediante el uso de dispositivos eléctricos, a fin de revertir la inflamación crónica.

El Dr. Kevin Tracey y sus colegas de los Institutos Feinstein de Northwell Health fueron los primeros en descubrir que el nervio vago también puede regular la inflamación. Este nervio parece ser un conducto clave del sistema reflejo inflamatorio que recluta células inmunitarias para combatir infecciones.

Un tratamiento viable

Esto es un hecho no tan desconocido, puesto que la estimulación del nervio vagal ya ha sido probada en ensayos clínicos y aprobada por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) para el tratamiento de la epilepsia. También, en enfermedades mentales como la depresión y los trastornos de ansiedad. Se tiene conocimiento que, en el caso de las personas que no han respondido a otros tratamientos, se puede colocar quirúrgicamente un pequeño dispositivo eléctrico debajo del pecho, similar a un marcapasos.

Un cable delgado se extiende hasta el cuello, donde se pueden transmitir impulsos eléctricos leves directamente al nervio vago durante todo el día. La FDA también aprobó recientemente nuevos estimuladores del nervio vago no invasivos para tratar las cefaleas en racimos y los migrantes sin cirugía.

Cada vez más estudios sugieren ahora que la estimulación del nervio vago puede ser una opción de tratamiento viable para algunas afecciones inflamatorias crónicas. Un ensayo clínico inicial para el tratamiento de la artritis reumatoide, por ejemplo, confirmó que la estimulación eléctrica de este nervio no solo era bien tolerada sino que también reducía significativamente los síntomas con un efecto similar al de las intervenciones farmacológicas.

El investigador de Northwell Health, Dr. Kevin Tracey, explicó que cuando un patógeno extraño invade el cuerpo, por ejemplo, el sistema inmunitario innato responde produciendo citocinas y otras células inmunitarias para localizar la infección.

“Estas células inflamatorias estimulan el nervio vago para indicarle al cerebro que dirija más recursos al sitio de la infección. Una vez que la infección cede, el nervio vago suprime el sistema inmunitario para que el cuerpo vuelva a la homeostasis. La intensidad de la inflamación parece estar controlada por el nervio vago”, Dr. Kevin Tracey.

¿Cómo se desarrolló el estudio?

Según reseña el portal Northwell Health, en la investigación se implantó quirúrgicamente un estimulador del nervio vagal en miniatura debajo de la piel de 17 personas con artritis reumatoide en etapas tempranas y tardías. 7 de los sujetos 7 no habían respondido al tratamiento previo.

El dispositivo administró una corriente eléctrica de 2,0 mA al nervio vago izquierdo durante 60 segundos cuatro veces al día. Esta estimulación eléctrica fue lo suficientemente fuerte como para que las personas sintieran pero no fueran afectadas por el dolor. Durante el lapso de 84 días, los participantes del estudio se sometieron a períodos de estimulación activa e inactiva.

Todos los individuos informaron síntomas reducidos mientras recibían impulsos eléctricos diarios en el nervio vago. Sin embargo, durante los períodos de abstinencia, los síntomas inflamatorios parecían regresar. El equipo de investigadores observó que reiniciar el tratamiento seguía siendo efectivo para aliviar los síntomas, lo que confirma aún más que el nervio vago juega un papel vital en la modulación del sistema inflamatorio.

Los científicos también encontraron que los beneficios clínicos de la estimulación del nervio vago se correlacionaron con una disminución del factor de necrosis tumoral (TNF), una proteína inflamatoria que exacerba el sistema inmunitario y daña las articulaciones de las personas con artritis. Este fue uno de los primeros estudios en humanos que demostró que la inflamación podía controlarse estimulando el nervio vago.