El poder curativo de recrearse al aire libre

La nueva era tecnológica ha sumergido a las personas en un estado de sedentarismo en el que permanecen inactivos por mucho tiempo, impidiendo el recrearse al aire libre. Esto se debe a la comodidad que les brinda el poder conectarse con amigos a través de dispositivos electrónicos o dedicar horas indefinidas a los videojuegos.

Esta situación ha llevado a la pérdida del contacto directo con la naturaleza, privando a los niños y adolescentes de los numerosos beneficios para la salud física, mental y social que esta ofrece.

A raíz de esto, Francisca Morales, oficial de Educación de UNICEF, ha manifestado lo positivo de que un niño interactúe en el medioambiente, al afirmar que: “los beneficios del juego para el desarrollo son múltiples y el uso del espacio al aire libre no solo ofrece un buen contexto para el desarrollo de habilidades motoras, sino que también se puede incentivar la capacidad de exploración, el conocimiento y cuidado de la naturaleza, el desarrollo de la autonomía entre muchas otras cosas”.

El uso excesivo de smartphones ha distanciado a los adolescentes de la naturaleza y de las interacciones sociales.

Ventajas de recrearse al aire libre

«Es importante estimular las actividades motoras y de coordinación: caminar, correr, subir y bajar escalones, montar bicicletas y triciclos. Pueden hacer algunos circuitos de actividad física que incluyan: correr, agacharse, saltar. Es importante explorar y mostrarles la naturaleza, por ejemplo, buscar insectos bajo las piedras, reconocer diferentes plantas y jugar con tierra”, enfatiza la doctora Keryma Acevedo, neuróloga de infancia y adolescencia.

Aquí les compartimos algunos de los beneficios que conlleva el pasar tiempo en espacios abiertos y naturales:

1. Creatividad y cognición mejoradas: Numerosos estudios respaldan la idea de que el contacto con la naturaleza estimula la creatividad y la función cognitiva. El simple acto de pasar tiempo al aire libre puede aumentar la capacidad mental y desatar la creatividad.

2. Físicos: Practicar deportes o realizar actividades al aire libre no solo proporciona entretenimiento, sino que también mejora la salud física y mental. Los adolescentes que participan en actividades extraescolares al aire libre experimentan múltiples beneficios, desde la mejora de la memoria a corto plazo hasta el combate contra la depresión y la ansiedad.

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5. Motivación a través del entorno natural: La práctica de ejercicio al aire libre se asocia científicamente con la motivación. El color verde del entorno natural tiene efectos relajantes y energizantes, motivando a los jóvenes a participar activamente en diversas actividades.
6. Desarrollo de la confianza: La recreación al aire libre desafía a los niños y adolescentes a superar obstáculos y afrontar situaciones inesperadas. Este contexto estimula la confianza en sí mismos, enseñándoles a dar lo mejor de sí, resolver problemas y aprender de las experiencias.
7. Habilidades sociales fortalecidas: Interactuar en entornos recreativos fomenta la relación con pares, desarrollando habilidades sociales esenciales como la empatía y la resolución de conflictos. Estas actividades promueven una sana competencia y la tolerancia a la frustración.