En 2015, Elon Musk y Sam Altman formaron parte del grupo de fundadores de una iniciativa que terminaría cambiando el mundo. En marzo de 2024, el magnate sudafricano presentó una demanda contra ese mismo proyecto, OpenAI. Es el resumen de una ruptura que lleva ahora a dos de los grandes CEO del momento a verse en los tribunales. ¿De dónde viene el desencuentro?
Elon Musk presentó su demanda contra OpenAI en el tribunal estatal de California. Según informa CNN, el actual hombre más rico del mundo afirma que la asociación de OpenAI y Microsoft va en contra de los estatutos del proyecto, que lo definen como una iniciativa sin ánimo de lucro, con el rol de controlar la evolución de la inteligencia artificial generativa.
Accede a las historias más relevantes de negocios, bienestar y tecnología. Entérate de nuestros rankings y eventos exclusivos. Suscríbete y recibe en tu correo el mejor contenido de Mercado.
Los cofundadores veían en esta evolución un potencial problema para la humanidad y querían garantizar que los pasos iban al ritmo correcto. Casi una década después, según Musk, esta esencia, registrada en los estatutos de OpenAI, no se cumple.
Por ello, apunta CNN, solicita un juicio y que Altman y Greg Brockman devuelvan el dinero que han ganado con el proyecto.
Cabe recordar que Microsoft compró una parte de OpenAI por US$10,000 millones cuando apenas habían pasado dos meses del lanzamiento de ChatGPT (30 de noviembre de 2022). Fue la primera de una serie de inversiones que podrían haber superado ya los US$20,000 millones.
Si bien la demanda es un paso más en la ruptura entre ambos cerebros, el desencuentro entre Musk y Altman viene de lejos. El sudafricano no se ha molestado en ocultarlo en las últimas fechas, con distintas declaraciones que apuntaban casi siempre en el mismo sentido: la pérdida de la esencia con la que se creó OpenAI y el peligro que eso puede suponer.
Musk abandonó OpenAI en 2018. En principio el motivo era su intención de evitar un posible conflicto de intereses con empresas como Tesla o Neuralink. Un año más tarde, el proyecto dio un giro, con Sam Altman volcado al 100 % y una mayor vocación de negocio.
Pese a que Musk siguió aportando financiación en sus primeros meses fuera del proyecto, la relación se fue rompiendo.
La primera gran muestra pública del desencuentro llegó en diciembre de 2022, ya con ChatGPT revolucionando el mundo. El ejecutivo sudafricano lamentaba que el bot accediese a las bases de datos de X, por entonces todavía Twitter, para entrenarse.
Not surprising, as I just learned that OpenAI had access to Twitter database for training. I put that on pause for now.
Need to understand more about governance structure & revenue plans going forward.
OpenAI was started as open-source & non-profit. Neither are still true.
— Elon Musk (@elonmusk) December 4, 2022
«OpenAI comenzó con código abierto y sin ánimo de lucro. Nada de eso sigue cumpliéndose», alertó, aludiendo ya al motivo por el que en los últimos días ha presentado su demanda contra OpenAI.
Musk fue, además, una de las grandes firmas del manifiesto que, en marzo de 2023, pedía pausar los avances en inteligencia artificial durante 6 meses.
«La sociedad ha hecho una pausa en otras tecnologías con efectos potencialmente catastróficos en la sociedad», explica la carta abierta, publicada por Future of Life Institute. «Podemos hacerlo aquí. Disfrutemos de una larga pausa veraniega de la IA y no nos apresuremos a caer sin estar preparados», pedían, entre otros, el propio Musk o el cofundador de Apple Steve Wozniak.
«Nadie, ni siquiera sus creadores, puede entender, predecir o controlar de forma fiable el funcionamiento y las reacciones de los robot», aseguraban los firmantes.
Para profundizar: ¿Pausar avances en IA durante 6 meses? La petición de un grupo de empresarios ‘tech’
Precisamente ese control de los avances era el gran objetivo por el que se fundió OpenAI. Musk volvía a señalar, esta vez de forma implícita, que esa función no se estaba cumpliendo en absoluto.
La demanda presentada en California intensifica de forma definitiva esta batalla. ¿Qué incidencia tendrá este paso en la evolución de ChatGPT, OpenAI y la revolución de la inteligencia artificial? Es el turno de los tribunales.
Borja Santamaría, con información de CNN
Suscríbete a la revista y regístrate a nuestros newsletters para recibir el mejor contenido en tu buzón de entrada.
