En plena cuarta revolución industrial, las empresas necesitan personal capacitado para adaptarse a los vertiginosos cambios. El talento es el gran tesoro, y más que encontrar y captar trabajadores talentosos, el gran desafío para las empresas en la presente década está en cómo retener a los que ya tienen.
La retención de talento es uno de los ejes principales de Mejores Empresas para Trabajar 2023, tanto de su revista especial como de los eventos organizados por Mercado Events en Santiago de los Caballeros (18 de julio) y Santo Domingo (20 de julio).
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Según datos ofrecidos por Google, se calcula que las empresas con una alta rotación de plantilla tienen un 10 % menos de productividad que las que mantienen estables a sus equipos. Además, el coste añadido de reemplazar un empleado puede ir desde un 12 % hasta, en casos extremos, un 213 %.
Son cifras que demuestran que invertir en la retención de talento es rentable, ya que equivale a invertir en productividad y en esquivar gastos.
Al margen del coste, el talento es indispensable para ofrecer un producto o servicio de calidad y adaptado a las necesidades del cliente y del mercado. También para subirse a la ola de la innovación, aprovechando oportunidades y evitando quedarse rezagado frente a los competidores.
Hay algunos elementos clave a la hora de trazar una estrategia para retener el talento, por ejemplo:
Cultura de empresa: Recoge los valores que explican cómo funciona una empresa. La comunicación interna, las relaciones jerárquicas, la apuesta por la innovación o la tolerancia al error son factores intrínsecos a cada organización que pueden tener peso a la hora de mantener a un empleado valioso.
Clima de empresa: Refleja cómo se siente el empleado trabajando en esa empresa. Es decir, el ambiente que se respira. Tiene que ver con los valores de la compañía, las relaciones interpersonales de los equipos, el lugar de trabajo o las relaciones con proveedores y clientes.
Cultura y clima de empresa: en qué se diferencian y cómo deben gestionarse
‘Employer branding’: Está muy relacionada con el clima de empresa, aunque hace más referencia a la reputación percibida por trabajadores o potenciales trabajadores, y no tanto a una sensación en un momento concreto.
Salario: Es un elemento básico, aunque no el único y, en ocasiones, no decisivo. Debe estar ajustado al mercado y a las competencias de cada trabajador. Gestionado con eficacia, puede ser un gran aliado.
Bonos: Esta herramienta que puede servir para motivar o valorar una buena acción. También para incentivar la iniciativa y la creatividad.
Flexibilidad: Ofrecer posibilidades de trabajo híbrido o remoto, o incluso jornadas adaptables, ayuda enormemente a la satisfacción de los empleados.
Formación y crecimiento del trabajador: Especialmente los trabajadores más jóvenes, pero en general en todos los casos, los empleados quieren sentir la posibilidad de crecer profesional y personalmente. La formación y el diseño de un camino de desarrollo dentro de la compañía son elementos importantes para ello.
Para gestionar estos y otros elementos claves para que un trabajador se sienta valorado y motivado para continuar en la empresa, se pueden tomar estas medidas:
Según un informe de la agencia de recursos humanos Ranstad, el 86 % de los empleados en América Latina considera importantes los valores de su empresa. Además, el 45 % ha renunciado a algún empleo por no ver posibilidades de crecimiento, y el 60 % dejaría su puesto si no se sintiese realizado.
Las acciones anteriormente detalladas ayudan a evitar esas fugas, reteniendo el talento por la vía de la motivación y el compromiso.
Estas y otras estrategias serán protagonistas de Mejores Empresas para Trabajar 2023.
Borja Santamaría
Perfil del empleado latinoamericano: personalidad y motivaciones
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