[vc_row][vc_column][vc_column_text]CUANDO LA cadena de farmacias estadounidense CVS determinó trabajar más en el cuidado de la salud, tomó la decisión de que ya no podía vender productos de tabaco, lo que le significó perder 2000 millones de dólares en ganancias. Cuando mi empresa de consultoría de impacto social, FSG, se enfrentó a la recesión de 2008, tomamos la decisión de no despedir gente, sino más bien reducir su salario en una escala gradual, de tal modo que quienes ganaban más tuvieran los mayores recortes. Todavía se habla de esa decisión, y hemos decidido volver a tomarla. Entiendo que los líderes empresariales enfrentan presiones de los inversionistas y de los banqueros para conservar el dinero y reducir las pérdidas, pero ni los inversionistas ni los banqueros se morirán de hambre. Estas son algunas medidas que las empresas pueden tomar para ayudar a sus empleados, a sus pequeños proveedores, a los profesionales de la salud y a las comunidades: A LOS EMPLEADOS: Seguir pagando salarios; una opción es, incluso, pagar menos del salario total. Esto es fundamental no solo como parte de la responsabilidad de la empresa; también reducirá de manera importante los costos de volver a contratar empleados cuando la economía vuelva a la normalidad. Otra opción es prestarles dinero a los empleados. Las empresas deben usar su crédito empresarial y su aval para tramitar préstamos con intereses bajos o sin intereses. Deben calcular el sueldo neto de los empleados después de las deducciones de nómina, y pedirles a los bancos que pongan a disposición préstamos equivalentes a un mes de salarios netos con un interés del tres por ciento, avalados por la empresa. Los empleados pueden pagar los préstamos con su salario[/vc_column_text][vc_column_text]durante el siguiente año cuando regresen a trabajar. Lo más probable es que muy pocos empleados de una compañía requieran atención médica, pero si no tienen seguro, esto puede llevarlos a la quiebra. Las empresas deben ofrecerse a cubrir los gastos médicos de los empleados que no estén asegurados; tal vez del dos al cinco por ciento de ellos incurran en gastos importantes y las empresas pueden negociar con sus aseguradoras una prima adicional para que tengan cobertura. A LOS PEQUEÑOS PROVEEDORES: Las empresas deben ofrecer pagos anticipados a sus pequeños proveedores a fin de proporcionarles efectivo ahora para bienes que necesitarán cuando vuelvan a producir. Es el equivalente empresarial a comprar tarjetas de regalo para que tu tienda local siga funcionando. A LOS PROFESIONALES DE LA SALUD: Como empresa global, tienes acceso a recursos de todas partes. Las empresas deben comprar y enviar suministros desde donde estén disponibles hacia donde se necesiten. Deben aprovechar su inventario de lo que pueda ser de ayuda, enviarlo hacia donde servirá más y asumir la pérdida. A LAS COMUNIDADES: Las grandes empresas deben usar sus fundaciones para ayudar a los comedores comunitarios, a las clínicas de atención gratuita y a otras organizaciones sin fines de lucro con el fin de atender las necesidades inmediatas de las comunidades donde tienen negocios. Nadie espera ni pretende que las grandes empresas tomen medidas extraordinarias para ayudar a todas las partes involucradas en su operación, pero las medidas firmes y creativas que puedan tomar ahora a fin de brindar ayuda inmediata definirán su legado en el futuro.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]Suscríbete a la revista y regístrate a nuestros newsletters para recibir el mejor contenido en tu buzón de entrada.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]