La resiliencia es uno de los valores que va a marcar el futuro de las sociedades, las compañías y los individuos a corto y medio plazo. Los tiempos más recientes han llegado repletos de golpes inesperados: una pandemia, guerras, inflación, crisis… Adaptarse a cambios vertiginosos se ha convertido en una obligación y para ello, la figura del capitán del barco es básica. Por ello, nos preguntamos: ¿cómo es un líder resiliente?
El ADN de un líder resiliente contiene diez cromosomas fundamentales que le ayudan a dirigir una empresa o equipo cuando todo se tuerce de forma inmediata y sorprendente. Estos son los 5 primeros:
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Un líder resiliente es un ser humano. Como tal, hay cosas que escapan de su poder de influencia. No puede controlarlo todo, y lo sabe. Aceptar que la incertidumbre es inevitable es la mejor manera de manejarla.
«La ausencia de certezas, la volatilidad y la inestabilidad se han convertido en el nuevo estándar dentro del entorno de los negocios, en la realidad que enfrentan empresarios y trabajadores en su quehacer diario», señala Tommaso Canonici, profesor de Innovación y Transformación Digital de ESIC, y coautor de ‘El líder ante la innovación’. «Algo que forma parte de nuestra cotidianidad no deberíamos vivirlo con angustia«.
«Conocer bien a los demás es inteligente, conocerse bien a uno mismo es sabiduría», afirmó Albert Einstein. Conocerse para confiar en uno mismo e identificar sus limitaciones. No se trata de una tarea aislada, sino que analizar los puntos fuertes y débiles, además de los objetivos y preocupaciones de uno mismo debe convertirse en un hábito.
«Los ejecutivos que son autoconscientes pueden dirigir a otras personas precisamente porque han hecho el trabajo de reflexionar sobre sus propios puntos fuertes y débiles, así como sobre sus aspiraciones a corto y largo plazo», confirma el profesor Alberto Ribera, de la Dirección de Personas en las Organizaciones del IESE, la escuela de negocios de la prestigios Universidad de Navarra.
Cuando estos análisis de 360 grados «se realizan correctamente y sus conclusiones se reciben con humildad y voluntad de progreso», Ribera apunta a que «pueden ser una fuente de información extremadamente útil para estimular el crecimiento personal y profesional». También para estar más preparado a las eventualidades.
Saber lo máximo posible para poder tomar decisiones bajo la tormenta. Un líder resiliente no deja de beber de aprender y de formarse. Tal y como apuntan desde Young Leaders of the American Initiative, un programa de emprendedores impulsado por el Departamento de Estado de EEUU, «el aprendizaje continuo permite cultivar las destrezas. Una vez que te concentres en obtener esos nuevos conocimientos, podrás adaptarte al cambio con más facilidad y confianza en ti mismo. También podrás compartir estas nuevas destrezas con tu equipo».
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Un líder resiliente debe ser capaz de alejarse de la tormenta y analizar las situaciones con perspectiva. La autoconfianza y el conocimiento, citados anteriormente, son dos de los mejores aliados para lograrlo. Sólo así se podrá ver la fotografía con objetividad, medir correctamente la amenaza y tomar la mejor decisión.
La objetividad permite observar las situaciones sin ir del optimismo al pesimismo, desestabilizando al equipo. Otro aspecto cave es el enfoque. Analizar la situación que requiere su atención, desplazando lo accesorio, lo que no ayudará a que la compañía avance entre las tinieblas. Existe un proverbio que reza: «si persigues a dos conejos, se escaparán los dos». El líder resiliente lo aplica a su día a día, especialmente durante una crisis.
Los vaivenes y la incertidumbre pueden terminar desviando a una persona o empresa de su objetivo final. En la medida de lo posible, es importante tratar de mantener la dirección. Dirigir el barco a puerto en lugar de responder a cada ola. «Los líderes resilientes deben potenciar los cambios desde la mentalidad del hoy hacia la del mañana», explican expertos de la agencia Deloitte.
«Si no crees en tus ideas y tu negocio, nadie más lo hará», afirman desde Young Leaders of the American Initiative. El convencimiento y la determinación son indispensables para pilotar la nave cuando más sopla el viento. (Borja Santamaría)
Continúa conociendo al líder resiliente. Aquí, la segunda parte del análisis.
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