En 2024, la compañía china BYD se consolidó como el líder mundial en vehículos eléctricos. Superó a Tesla en ingresos, alcanzando los 107,363 millones de dólares. Esta cifra marcó un crecimiento del 29 % respecto al año anterior, mientras que su beneficio neto subió un 34 %, llegando a 5,561 millones de euros.
Este resultado no solo rompió expectativas, sino que también estableció un récord histórico para la empresa. Los analistas no anticipaban que BYD superara los 40.000 millones de yuanes en ganancias.
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El éxito de BYD no fue casualidad. Su liderazgo en el mercado chino de autos eléctricos le permitió mantener una posición firme durante 2024. Al mismo tiempo, incrementó sus ingresos por vehículos y productos relacionados en un 27,7 %, sumando más de 85.000 millones de dólares.
La compañía destacó además que fue la primera automotriz en producir 10 millones de vehículos de nuevas energías. Este hito reafirma su compromiso con la movilidad sostenible y su capacidad de producción.
Aunque Tesla lideró durante años el mercado de eléctricos puros, BYD ya la había superado en 2022 al incluir también híbridos enchufables. Sin embargo, en el último trimestre de 2024, la empresa china la desplazó también en ventas de eléctricos 100 % puros.
La competencia entre ambas marcas se ha intensificado, pero BYD tomó la delantera gracias a su innovación constante. Tesla mantiene una sólida base, pero enfrenta ahora un desafío real frente a una empresa que domina no solo por volumen, sino también por tecnología.
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Uno de los factores clave del crecimiento de BYD ha sido su inversión en investigación y desarrollo. En 2024, destinó más de 7.400 millones de dólares a I+D, lo que representa un aumento del 35,68 % frente al año anterior.
Además, ha sorprendido al mercado con el lanzamiento de una nueva plataforma de supercarga. También anunció que sus funciones de conducción inteligente estarán disponibles sin coste adicional, lo que podría transformar el estándar de la industria.
El presidente y fundador de la empresa, Wang Chuanfu, enfatizó la vitalidad de la industria china frente a las incertidumbres globales. Según él, el doble impulso de la tecnología y la inteligencia artificial ha permitido que las marcas locales ganen participación de mercado rápidamente.
BYD no se ha limitado al mercado asiático. Su expansión internacional incluye presencia en más de 50 países, entre ellos Brasil, donde construye un nuevo complejo de fábricas. Su apuesta por Latinoamérica refuerza su estrategia de diversificación.
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Con la mirada puesta en el futuro, BYD planea fortalecer su independencia tecnológica y aumentar su competitividad. Wang aseguró que acelerarán la expansión internacional para que China lidere la transformación global de los vehículos eléctricos.
Esta visión se alinea con el auge de la movilidad sostenible. Cada vez más países adoptan políticas que favorecen los autos eléctricos, abriendo un terreno fértil para que BYD continúe su crecimiento.
La marca china ha logrado consolidarse como una referencia global. Su avance no solo representa un cambio en la industria automotriz, sino también un paso firme hacia un modelo de transporte más limpio, eficiente y accesible.
Con innovación, expansión y visión estratégica, BYD redefine el liderazgo en el competitivo mundo de los vehículos eléctricos. Y lo hace con una fórmula que combina tecnología de punta, inversión sostenida y un enfoque global.
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