El mes de octubre será recordado por muchos sectores, especialmente para aquellos productores de botellas de vidrio y todos los submercados que interactúan entre sí. Pues, la escasez de este material ha provocado semanas críticas para los despachos de este producto, tanto hacia el interior de un país como hacia el exterior, ya que la situación es más compleja que una simple insolvencia local, y la solución requiere de muchos factores a nivel internacional.
La carencia de envases de vidrio es actualmente un problema global que surgió principalmente a causa de la pandemia de covid-19. Durante el 2020 se registraron importantes aumentos en el consumo de alimentos y bebidas, lo que ocasionó una disminución de stocks de envases de vidrio. A eso se le sumó el hecho de que muchas industrias no pudieron trabajar al 100 % de su capacidad por las diferentes restricciones sanitarias. El resultado fue que se consumieran los stocks de reserva en casi todas las plantas a nivel mundial.
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Por otra parte, a la falta de materias primas vírgenes para la producción, se suma la carencia de materiales reciclados debido a la baja significativa de actividades de recolección, provocado por la pandemia.
En Argentina, los industriales han elevado la alarma de una baja en la oferta de insumos como el tereftalato de polietileno (PET), de entre un 30% y un 35%, un insumo necesario en la industria de bebidas gaseosas. Asimismo, los famosos viñedos argentinos están teniendo dificultades para encontrar botellas de vino, en el ejemplo más reciente de como los retrasos en la cadena de suministro afectan la producción del país sureño.
Los enólogos aseguran que los empleos y las ganancias están en riesgo si no embotellan sus productos a tiempo, mientras que los políticos locales advierten que los precios subirán para los consumidores
El presidente de Federación Agraria Argentina, Carlos Achetoni, manifestó su preocupación por el faltante de envases de vidrio, como consecuencia de una restricción de oferta a nivel local que podría derivar en enormes complicaciones a varias producciones de economías regionales, que se encuentran en la antesala de sus cosechas.
Nuestro país tampoco es ajeno a este problema. La Cervecería Nacional Dominicana informó que la demanda de su “Marca País”, la cerveza Presidente, ha crecido en el periodo de reapertura económica y la empresa, a pesar de haber aumentado la producción en comparación con el periodo previo a la crisis de salud, ha encontrado dificultades para satisfacerla al 100%.
La razón fundamental es que la empresa no ha recibido la cantidad de botellas que requiere para hacerle frente a esa nueva demanda debido a la escasez global de envases de vidrio, a lo que se suman las grandes dificultades en la cadena mundial de suministro, algo que también se siente en el mercado local al complicarse el acceso a varios bienes de consumo masivo.
En lo que va de año, solo ha recibido poco más del 50% de las nuevas botellas que había ordenado en el exterior
Para enfrentar la crisis, la cervecería se ha enfocado en dos potenciales soluciones: la reactivación de una fábrica productora de botellas en el país y el impulso de programas que incentiven el retorno de las botellas.
Con referencia a la primera solución, la empresa firmó el pasado año un acuerdo con Caribbean Glass Industry para la reactivación de la industria de vidrio en el país. Este proyecto permitirá acelerar los planes de fabricación de nuevos envases. Sin embargo, la operación se encuentra en fase de pruebas.
En tanto, en los programas de retorno, se han puesto en marcha varias iniciativas. Una destacada es la de pagar un 50% más a los puntos de venta y botelleros por cada envase que sean retornados.
Además de este sector, el mercado de paneles solares también se encuentra en alerta. La mayor empresa de energía solar del mundo anunció que la escasez de vidrio está elevando los costos y retrasando la producción de nuevos paneles.
Los precios del vidrio que recubre los paneles fotovoltaicos han aumentado 71% desde julio, y los fabricantes están teniendo dificultades para producirlo lo suficientemente rápido como para mantener en inventario las ventas de más de una semana.
De este modo, esta escasez llega justo cuando la industria solar se inclina hacia los paneles bifaciales, que aumentan tanto la producción de energía como los requisitos de vidrio.
La industria farmacéutica también se encuentra preocupada. Pues, la escasez de vidrio complica la producción establecida para satisfacer la demanda masiva de vacunas contra el coronavirus, cuyos envases son hechos con este material. En ese sentido, los fabricantes se encuentran actualmente amenazados por la falta de materias primas.
De esta forma, se pone de manifiesto que el covid-19 dejará huellas en todas las industrias, que ahora aprenden a lidiar con nuevos ritmos de demanda. (RM)
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