En el competitivo y ajetreado mundo actual, la capacidad de realizar múltiples tareas simultáneamente es vista como una ventaja. Sin embargo, el neurocientífico Charan Ranganath advierte que esta práctica puede ser perjudicial para la memoria.
¿La razón? «La corteza prefrontal nos ayuda a centrarnos en lo que necesitamos hacer para alcanzar nuestros objetivos, pero esa capacidad se ve comprometida si saltamos continuamente de un objetivo a otro», explicó Ranganath. En el cerebro, existe una competencia entre los conjuntos de neuronas involucrados en diferentes tareas, lo que dificulta realizar múltiples actividades de manera eficiente.
Por ejemplo, revisar el correo electrónico mientras se escucha una conferencia o clase solo llevará a no recordar adecuadamente lo que se estaba escuchando. «Al cambiar de objetivo, como comenzar a revisar el correo, las neuronas se distraen y graban recuerdos fragmentados de la conferencia. Esto se debe a que se utilizan muchas funciones ejecutivas para gestionar el cambio entre actividades, dificultando la formación de recuerdos duraderos», señaló Ranganath. No obstante, hay una excepción a esta regla: las tareas relacionadas entre sí. «Si estás horneando un pastel, necesitas precalentar el horno y luego preparar la masa. Al unir estas actividades en una tarea más grande, serás capaz de gestionarlas mejor», ejemplificó.
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Para evitar los efectos negativos de la multitarea, Ranganath recomienda finalizar una actividad antes de comenzar otra y minimizar las distracciones. Sugiere silenciar el teléfono, especialmente las notificaciones de correos electrónicos y mensajes, durante las tareas importantes. Además, recomienda tomar descansos para despejar la mente o estirar las piernas.
Hábito 3: Establecer rutinas monótonas
Contrario a lo que podríamos imaginar, el cerebro humano no está diseñado para recordar todo; de hecho, es selectivo en cuanto a lo que retiene. «La mayoría de las experiencias que vivimos o la información a la que estamos expuestos será olvidada», explicó el neurocientífico Charan Ranganath.
Solo aquellos eventos o experiencias asociados con emociones fuertes como miedo, ira, deseo, felicidad o sorpresa, que liberan químicos como adrenalina, serotonina, dopamina o cortisol en el cerebro, terminarán siendo fijados en nuestras neuronas. Estas sustancias químicas son esenciales para la plasticidad cerebral, que es fundamental para la memoria.
«La plasticidad en el cerebro nos ayuda a realizar tareas, especialmente aquellas repetitivas, de manera más eficiente», explicó Ranganath, profesor de la Universidad de California, señalando que esta capacidad disminuye con la edad. Por eso, recordar una contraseña recién cambiada para acceder a una cuenta bancaria, teléfono celular o correo electrónico se vuelve más difícil con el tiempo. «Cuando cambias la contraseña, las neuronas que almacenaban la vieja contraseña compiten con las que guardan la nueva», indicó.
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Para preservar la plasticidad cerebral, romper con la monotonía y la rutina es crucial. Según Ranganath, variar nuestras actividades y experiencias es la mejor manera de mantener esta capacidad y, por ende, mejorar nuestra memoria.
Hábito 4: Dejarle todo a la memoria
Según el experto, el cerebro no está diseñado para recordar literalmente todo lo que experimentamos, una tarea que sería monumental. «Se estima que el estadounidense promedio está expuesto a 34 gigabytes (o su equivalente: 11.8 horas) de información al día», señaló el profesor.
«El propósito de la memoria no es simplemente recordar el pasado, aunque pueda hacerlo. Más bien, es extraer la información crucial del pasado que necesitamos para entender el presente y prepararnos para el futuro», explicó Ranganath, quien además recomendó no depender únicamente de la memorización para aprender algo.
«El aprendizaje más efectivo ocurre cuando nos esforzamos por recuperar un recuerdo y luego obtenemos la respuesta que buscamos», subrayó. «Por ejemplo, unos minutos después de que te presenten a alguien, ponte a prueba y trata de recordar su nombre. Luego, a medida que la conversación avanza, hazlo de nuevo. Cuanto más espaciados sean estos intentos, mejor», sugirió.
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