Los miembros de la Generación Z, nacidos entre 1997 y 2012, están irrumpiendo en el mundo laboral con hábitos y perspectivas que desconciertan a muchos gerentes. Aunque algunas de estas características pueden ser beneficiosas para los empleadores, otras plantean desafíos significativos.
Según una encuesta reciente realizada por ResumeTemplates.com, 1 de cada 10 miembros de la Generación Z fue incluido en planes de mejora del rendimiento durante el año pasado. Estos son algunos de los hallazgos de la encuesta y ofrece recomendaciones para los empleadores que desean aprovechar al máximo el potencial de esta nueva generación de trabajadores.
Accede a las historias más relevantes de negocios, bienestar y tecnología. Entérate de nuestros rankings y eventos exclusivos. Suscríbete y recibe en tu correo el mejor contenido de Mercado.
La encuesta revela que los empleados de la Generación Z tienden a trabajar menos horas, participan más en actividades no relacionadas con el trabajo y son menos propensos a cumplir con las expectativas de desempeño en comparación con trabajadores de otras generaciones. Sin embargo, también se destacan por priorizar el equilibrio entre la vida laboral y personal, y por su uso eficiente de la tecnología. Según Andrew Stoner, coach profesional ejecutivo y redactor de currículos en ResumeTemplates, estas cualidades pueden dar la impresión de una productividad reducida, aunque no siempre sea el caso.
A pesar de sus puntos fuertes, la Generación Z enfrenta percepciones erróneas que pueden dificultar la construcción de relaciones positivas con sus empleadores. La encuesta muestra que los empleados de esta generación tienen una tendencia mayor a mentir sobre sus horas de trabajo, retrasos y cumplimiento de plazos. Stoner sugiere que esta deshonestidad puede deberse a la falta de experiencia y al temor a las repercusiones, exacerbados por la facilidad de la comunicación digital.
Para gestionar eficazmente a los trabajadores jóvenes, Stoner recomienda que las organizaciones establezcan métricas de productividad claras, fomenten el compromiso mediante tareas significativas y permitan el uso de la tecnología para demostrar eficiencia. Además, promover un entorno de confianza, brindar apoyo y tutoría, establecer expectativas claras y fomentar el liderazgo ético son prácticas clave para mejorar la relación con los empleados de la Generación Z.
La encuesta también destaca diferencias significativas entre generaciones. Mientras que el 10% de los empleados de la Generación Z trabaja menos de cuatro horas por día, solo el 4% de los millennials, el 5% de la Generación X y el 3% de los baby boomers reportan lo mismo. Además, los trabajadores más jóvenes son más propensos a participar en actividades no laborales durante las horas de trabajo, como comunicarse con amigos y familiares, navegar por Internet y tomar descansos prolongados.
Suscríbete a la revista y regístrate a nuestros newsletters para recibir el mejor contenido en tu buzón de entrada.