El reelecto presidente de República Dominicana, Luis Abinader, ha comenzado el proceso de conformación de su nuevo gabinete de funcionarios para su segunda gestión al frente del Poder Ejecutivo. Las designaciones fueron oficializadas mediante los decretos 390-24 y 391-24, lo que marca un nuevo rumbo en la administración pública del país.
De asesor a Ministro Administrativo de la Presidencia
Uno de los nombramientos más destacados es el de Andrés Bautistacomo nuevo titular del Ministerio Administrativo de la Presidencia, en sustitución de Igor Rodríguez, quien ejercía el cargo de manera interina tras la licencia de José Ignacio Paliza. Bautista es un miembro fundador del Partido Revolucionario Moderno (PRM) y fue su presidente de 2014 a 2018.
Con una extensa trayectoria política, representó a la provincia Espaillat en el Senado durante cuatro períodos (1994-2010), ocupando cargos clave como presidente de la Cámara Alta y de la Comisión de Industria y Comercio. Su experiencia se extiende también a la administración local, habiendo sido regidor honorífico del municipio de Moca y director del Instituto del Tabaco de la República Dominicana (1982-1986).
Más recientemente, se desempeñó como asesor honorífico de Abinader durante su primer mandato (2020-2024). La formación en derecho y agronomía de Bautista sugiere que aportará una combinación única de habilidades a su nuevo cargo, lo que permitirá una gestión administrativa eficaz y la toma de decisiones informadas en el Ministerio Administrativo de la Presidencia.
De Alianzas Público-Privadas a Administración Pública
Otro nombramiento relevante es el de Sigmund Freundcomo ministro de Administración Pública, reemplazando a Darío Castillo Lugo. Castillo Lugo, a su vez, ha sido designado Comisionado para las Reformas del Estado. Freund tiene una notable experiencia en la gestión de alianzas entre el sector público y privado, habiendo sido director ejecutivo de la Dirección General de Alianzas Público-Privadas y del Fideicomiso Pro-Pedernales.
Además, actualmente se desempeña como delegado político del PRM ante la Junta Central Electoral (JCE). Su nueva posición en el Ministerio de Administración Pública sugiere un enfoque en la colaboración y coordinación entre los sectores público y privado, lo que podría resultar en una gestión más eficiente y moderna de la administración pública.