El lado oculto de las sustancias para “fitness”

Por [email protected] | diciembre 12, 2022

La búsqueda de la mejoría en el rendimiento físico es un empeño común, pero cuando se convierte en obsesión sobrepasa los límites saludables, llegando a ser un riesgo para la salud. Usadas en algunos casos para el aumento o la disminución de peso, las sustancias para el «fitness» pueden causar enfermedades o efectos secundarios, ya que no disponen del monitoreo característico de los fármacos ni de asesorías médicas capacitadas.

Según Mayo Clinic, los medicamentos más comunes son los esteroides anabólicos, que sirven para aumentar la fuerza y masa muscular. Normalmente son modificaciones sintéticas de la testosterona, aprobadas para algunos usos médicos, entre los cuales no se encuentra el rendimiento físico. Como parte de ellos, destaca el peligro de los esteroides de diseño. Estos son drogas sintéticas creadas en forma ilícita para no ser detectadas por las pruebas de drogas existentes. Aparte de no estar aprobados para ningún uso médico y ser ilegales, representan una amenaza para la salud de los atletas, sus consumidores principales.

Los efectos secundarios de su uso pueden ser: acné intenso, aumento del riesgo de tendinitis y ruptura del tendón, anomalías hepáticas y tumores, esterilidad, períodos infrecuentes o ausencia del periodo y muchos otros que pueden ser irreversibles.

Los diuréticos son otro medicamento comúnmente utilizado por la comunidad «fitness». Como droga que cambia el equilibrio de fluidos y sales en el cuerpo, puede llevar a la deshidratación y causar una pérdida de peso. Los estimulantes, como las bebidas energéticas, son otro recurso común para atletas y aficionados del rendimiento físico. Estos tienen efectos sobre el sistema nervioso central y aumentan la frecuencia cardíaca y la presión arterial, reduciendo la fatiga y el apetito, o mejorando la resistencia.

¿Quieres comprar un ‘fitness tracker’? Considera esto primero

Los efectos secundarios a largo plazo de estas sustancias han demostrado ser exponencialmente mayores que sus pocas ventajas a corto plazo. Los daños a la salud pueden ser irreversibles en altas proporciones, siendo algo sumamente arriesgado, por no mencionar que en muchos casos se trata de sustancias ilegales.

Recomendaciones para empezar en el gimnasio:

La actividad física es uno de los pilares de una vida saludable. Entre sus distintas formas, ir al gimnasio representa una de las más populares. Para mantener este hábito de forma correcta, sigue estos consejos:

  • No te obsesiones. Es fácil dejarse llevar por las metas, y obsesionarse con la razón que te llevó a ir al gimnasio: perder peso, ganar masa muscular, tonificar, etc. Sin embargo, la actividad física es mucho más que eso. Ten en mente que cada vez que vas al gimnasio, haces algo por tu salud física y mental, que es mucho más que tachar un simple objetivo
  • Establece un horario. Disponer de días y horarios específicos en los que acudirás al gimnasio según tu estilo de vida reduce las probabilidades de rendirte.
  • Ponte retos graduales. Para mejorar el rendimiento físico, te debes desafiar según tu nivel e ir mejorando día tras día. Esto te permitirá acumular moral y evidencias de todo lo que has mejorado.
  • Asesórate por profesionales. Los expertos están para ayudarte y guiarte a cuidar tu cuerpo para evitar lesiones y enfermedades.
  • Mantén la disciplina. Con este hábito, la motivación llegará de forma segura junto a los resultados, que son una consecuencia de la aplicación de los demás consejos.

Marian Briceño. Artículo publicado en la revista especializada en salud MediHealth.

Toma nota: El ‘checklist’ que debemos cumplir para tener un corazón sano

Suscríbete a la revista y regístrate a nuestros newsletters para recibir el mejor contenido en tu buzón de entrada.