El que compra lo que NO necesita, termina vendiendo lo que SÍ necesita

Por pferreras | noviembre 22, 2019

¿Esa oferta de #BlackFriday es para mí?

De cara al Black Friday, el bombardeo publicitario aumentará con un objetivo: conquistar la intención de compra de los potenciales consumidores, desde que el que quiere un helado, hasta el que busca un dispositivo de aire acondicionado.

La estrategia fundamental para el comercio cautivar a su audiencia es la oferta. Anuncios de descuentos del 50 %, 30 % o hasta 65 % esperan motivar al menos a la visita a la tienda, lo cual se convierte en compra en parte de los casos.

Siempre digo que el compra permanentemente lo que no necesita, tarde o temprano se verá obligado a vender lo que sí necesita, debido a que la negligencia de necesidades reales (como comer o la renta), las deudas de tarjetas de crédito, sumado a una posible pérdida de ingresos o el empleo, castiga a quienes no han sido reflexivos en la administración de sus finanzas personales.

Entonces, ¿qué es una oferta? ¿Cómo puedo aprovecharla? ¿Son para mí todas las ofertas que veo en los anuncios? Me alegrará saber que hiciste buenas compras este Black Friday, pero más me alegrará saber que tus consumos fueron fundamentados en una capacidad real de compra, la cual no comprometerá tu futuro financiero inmediato.

¿Cómo sé que una oferta es para mí? Te propongo cuatro puntos.

  1. Investigué y el descuento es real

Aprovechando la desinformación de los posibles compradores, a menudo anuncian que mercancías aspiracionales, como un smart TV o un comedor, cuentan con descuentos de hasta un 50 % que, en la práctica, solo llegan a un 10 %. Aumentarás tus posibilidades de beneficiarte de una oferta real, si en meses anteriores verificaste el precio aproximado de lo que deseas, y has comprobado que, efectivamente, hay una diferencia sustancial de precio a tu favor.

  1. Lo quiero antes de ver el anuncio

Si no estabas pensando en tener un smart TV de 42 pulgadas antes de ver ese anuncio, no es una oferta. Los descuentos del comercio por Black Friday o cualquier otra temporada solo agregan valor a tu vida cuando realmente demandas el bien promovido.

Esto también aplica a la calidad y característica de la mercancía. Quizás querías un televisor, pero no de esa marca ni de ese tamaño. En la medida en la que la oferta se separa de lo que aspiras de manera genuina, te beneficia menos.

  1. Lo puedo comprar sin una deuda tóxica

Tal vez comprobaste que tiene un buen descuento y es exactamente el producto al que aspiras, pero tu situación financiera actual no te permite endeudarte por ese tiempo, pagando mensualmente ese monto. Si esas son las condiciones a las que tienes que comprar, esa oferta no es para ti.

  1. No tengo que renunciar a la garantía

“Es una oferta, por lo tanto, este aparato no tiene garantía”, me dijeron en una megatienda, me fui. Si compras algo de valor, en especial un electrodoméstico, debes cubrirte con la garantía, puesto que esos aparatos encierran diversos riesgos operativos. Si para aprovechar la oferta tienes que renunciar al beneficio de poder cambiar el producto en caso de desperfecto, no es una oferta.

De camino al #BlackFriday te deseo buenas compras, aprovechando ofertas reales.

@cguisarre